
Viernes, 20 de noviembre 2020
La última normativa impuesta por la pandemia del coronavirus permite asistir a un funeral a un máximo de cincuenta personas si el recinto está al aire libre y 25 si el lugar está techado o cerrado. Un funeral celebrado el viernes a las 17.30 horas en el cementerio de San José de la capital granadina congregó a cien ciudadanos lo cual sobrepasó con creces lo estipulado en la normativa de la Junta de Andalucía.
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Un particular denunció los hechos y Policía Nacional se personó en cuestión de pocos minutos en el camposanto granadino para tratar de disolver a los allí congregados hasta dejar el número en un máximo de 50.
La mera presencia policial hizo que un buen número de asistentes al funeral huyeran a la carrera de la zona, según han comentado a IDEAL testigos presenciales de los hechos, y sesenta de estas personas fueron denunciadas por los agentes de la Policía Nacional por incumplir la normativa establecida para prevenir contagios por la Covid-19.
El entierro se pudo celebrar sin más problemas, pero sólo con un número de congregados ajustado a lo que marca la normativa. Las personas que no pudieron presenciar el entierro se quedaron en las puertas del camposanto en grupos de menos de seis individuos
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