Apedrean a varios policías que iban a registrar pisos en Granada por no tener el apoyo de antidisturbios, denuncia el SUP

Ya lo dice la sabiduría popular: si la manta es corta, es imposible cubrirse a la vez la cabeza y los pies. Pues, según el Sindicato Unificado de Policía (SUP), es lo que está ocurriendo en Granada con la Policía Nacional, que faltan efectivos y hay un exceso de problemas y tareas, una situación que está estrechamente relacionada con las necesidades que genera la expansión de la Covid-19.

En este sentido, varios miembros del cuerpo fueron apedreados cuando llevaban a cabo varios registros a la vez en una serie de domicilios ubicados en una zona conflictiva de la capital, señalaron a IDEAL fuentes del SUP. Antes de iniciar la operación, habían solicitado el apoyo de patrulleros de seguridad ciudadana, pero sólo estaban disponibles apenas media docena de ellos, un contingente «claramente insuficiente» para realizar con garantías de seguridad la misión encomendada.

Los investigadores iban a entrar en un territorio hostil y entendían que el número de refuerzos debía ser sensiblemente mayor, recalcaron los medios consultados, que aseguraron que el propio juez que supervisaba la actuación compartía el mismo criterio.

Así las cosas, solicitaron el respaldo de la Unidad de Intervención Policial (UIP), conocidos popularmente como los antidisturbios, pero resultó que estaban participando en dispositivos para velar por el cumplimiento de las normas impuestas por la Junta de Andalucía para frenar el avance de la pandemia. En concreto, informó el SUP, «estaban vigilando para impedir los botellones».

En resumen, que fueron con menos protección de la que exigía su cometido y fueron recibidos con una lluvia de piedras y objetos.