Estado en el que quedó el bar de Armilla. Pepe Marín

Incendio en Armilla

«Se oyó una explosión muy fuerte y parecía que todo se iba a caer»

El incendio y posterior deflagación en un bar de Armilla dejó un herido y la Guardia Civil investiga si las llamas fueron intencionadas

Pepe Moreno

Granada

Miércoles, 29 de enero 2025, 00:30

Solo hubo una persona herida y fue un milagro. Debido a la céntrica ubicación del bar en el que ocurrió la sonada detonación, numerosos vecinos se enteraron de lo ocurrido en el momoento de los hechos. «Estábamos viendo la televisión después de cenar y, de ... repente, se escuchó una explosión muy fuerte. Nos dimos un susto muy grande. Después nos asomamos al balcón que da a la calle y vimos salir las llamas por la puerta y las ventanas del bar. Después empezaron a salir todos los vecinos a la calle para ver qué había pasado y más tarde llegó la policía y los bomberos».

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Otra vecina, que vive pared con pared con el bar calcinado, se asoma a la ventana con curiosidad. «Se escuchó una explosión muy fuerte y parecía que el bloque entero se iba a caer». La suerte fue que la explosión ocurrió un lunes por la noche y la zona no estaba frecuentada por vecinos, tal y como ocurre a otras horas del día.

Durante la mañana del martes, los vecinos se agolpaban a las puertas del bar, que está totalmente destrozado y calcinado. Comentaban cómo pudo ocurrir y cuáles son las presuntas causas de la impactante escena. Eso mismo es lo que estudia la Guardia Civil de Granada: qué pasó este lunes por la noche en un bar de Armilla. Sobre las 23.00 horas se originó un incendio que derivó en una fuerte explosión, unos hechos que los investigadores intentan dilucidar si ha sido intencionado o fortuito.

Las rejas de hierro forjado que impedían la entrada por las ventanas del establecimiento están en el suelo. También parte del muro de la fachada. Todo ello debido a la gran deflagración ocurrida en este bar de Armilla, ubicado entre la calle Palencia y la avenida Poniente, justo en las obras de extensión de línea del metro de Granada.

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Numerosas llamadas alertaron al servicio de emergencias 112 Andalucía. Hasta la zona se desplazaron los bomberos, la Guardia Civil y la Policía Local de Armilla. Tras las labores de extinción de las llamas, aparecieron Técnicos Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos (Tedax) para analizar lo ocurrido. Según los vecinos de la zona, los agentes se llevaron varias pendras y distintos objetos que había esparcidos por el suelo, a las puertas del local, y que podrían servir para aclarar el origen del fuego. Unos trabajos de extinción y recogida de pruebas que acabaron sobre las 0.20 horas de la madrugada del martes.

Un hombre de 31 años fue evacuado al Hospital Clínico San Cecilio de Granada por quemaduras y testigos de lo ocurrido afirman que varias personas salieron corriendo del lugar de los hechos tras el estruendo que escucharon. El bloque en el que se ubica el local ahora calcinado tampoco tuvo que ser desalojado y, al parecer, tampoco sufrió daños estructurales a pesar de la virulenta detonación.

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Línea de investigación

Es por todo ello que la Guardia Civil está tratando de aclarar lo ocurrido mediante testimonios y pruebas recogidas sobre el terreno y de si se pudiera tratar de un ataque intencionado o de un accidente. La línea de investigación de los agentes parte de la hipótesis de que las llamas han sido provocadas, pero todavía no están claros los motivos, según apuntan a IDEAL fuentes cercanas al caso. Por lo tanto, se estaría buscando al presunto o presuntos responsables. Varios vecinos que viven próximos o en la misma calle Palencia cuentan a IDEAL que el bar llevaba bastante tiempo ubicado en esa céntrica esquina del municipio de Armilla, pero que el anterior dueño decidió traspasarlo cuando dieron comienzo las obras del metro de Granada, que unirán la capital con Churriana y Las Gabias. Hace cuestión de poco más de dos meses, otras personas compraron el negocio para ponerse el mando del mismo. El local, que ahora se encuentra acordonado y prácticamente en ruinas, pertenece a una tercera persona que es vecina del municipio y que lo tenía alquilado a las personas que regentaban este negocio de hostelería.

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