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Viernes, 3 de enero 2025, 09:35
El maracenero Luis Cantos (1979) es mucho más que un maestro de Educación Infantil. Además de ser jefe de estudios del colegio Abadía de Albolote, su creatividad y pasión por la enseñanza le han llevado a ser reconocido como uno de los diez mejores docentes de España, siendo nominado a los premios Educa Abanca 2024, un evento que premia desde hace años las mejores prácticas docentes en el país en todas las etapas educativas, desde Infantil a la Universidad. Entre sus múltiples facetas, también dirige la compañía de teatro 'Abalut', formada por miembros de la comunidad educativa de su colegio.
Este reconocimiento es un hito en su trayectoria, y Luis lo vive con humildad y gratitud: «Me siento muy afortunado de pertenecer a una lista con personas tan talentosas. Este reconocimiento es un impulso para seguir luchando por una nueva escuela que respete la infancia y fomente la creatividad». Luis confiesa que su vocación surgió gracias a una maestra que marcó su vida: «Fue Sor Luisa quien plantó en mí la semilla de esta profesión. Siempre la recuerdo con mucho cariño». Hoy, ese amor por la enseñanza se traduce en su dedicación diaria: «Para mí, ser maestro significa felicidad; me mantiene vivo y activo».
El método de Luis se basa en el aprendizaje por proyectos, fomentando la lectura, la escritura y, sobre todo, la creatividad. «Creo que mi éxito radica en mi capacidad para movilizar a alumnos, familias y compañeros. Sigo teniendo esa mirada de niño que me permite empatizar y crear cosas nuevas». Luis también reconoce la importancia de la tecnología en la educación, aunque advierte sobre su uso desmedido: «Las tecnologías son una herramienta fundamental, pero nunca deben sustituir el trabajo en equipo, el contacto humano o lo manipulativo. Hay que enseñar a usarlas de forma responsable».
Además de su trabajo en el aula, Luis ha impulsado numerosos proyectos solidarios, colaborando con asociaciones como Héroes para la Leucemia o la Asociación Española contra el Cáncer. «Creo que el jurado valoró mi capacidad para movilizar a la comunidad educativa y mi compromiso social. Me esfuerzo por implicar a instituciones locales y ayudar a quienes lo necesitan».
Para Luis, este reconocimiento también es un logro para su ciudad natal: «Llevo con orgullo ser maracenero. Maracena es mi hogar y el lugar donde he podido desarrollar mi vena creativa».
Luis no duda en animar a sus colegas a innovar: «Les diría que avancen, que luchen y que disfruten. No es un camino fácil, pero nuestros niños merecen siempre la mejor versión de nosotros». En cuanto al futuro de la educación, Luis apuesta por una mayor inversión y un enfoque más centrado en el alumnado: «Tenemos una cantera de docentes creativos y luchadores. Necesitamos aprovechar ese potencial y asegurarnos de que se invierta en lo más importante: nuestros estudiantes».
De los momentos más especiales en su carrera, Luis destaca dos: «El día que me avisaron en clase que acababa de ser papá, y cuando mi colegio recitó a Lorca y me eligieron pregonero de las fiestas del pueblo. Son recuerdos que siempre llevaré conmigo». Luis Cantos Blanca es un ejemplo de cómo la pasión por la enseñanza y el compromiso con la comunidad pueden marcar la diferencia. Su reconocimiento no solo celebra su talento, sino que también pone en valor la importancia de la educación pública y la dedicación de tantos docentes como él.
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