Las arquetas de la calle Santiago dejan de 'dar las campanadas' al paso de los coches

En el caso del barrio del Realejo, la junta municipal de distrito correspondiente al mes de octubre trató la cuestión de unas arquetas ubicadas a la altura del número 32 de la calle Santiago que llevaban al menos toda una década desniveladas. La consecuencia es que hacían un molesto ruido al paso de las ruedas de los coches que tenían soliviantados a los vecinos de la zona.

Tras la queja vertida en la junta de distrito, la concejalía de Mantenimiento ha intervenido la semana pasada y las arquetas de la calle Santiago han dejado de 'dar las campanadas' al paso de los coches. Esta 'función' corresponderá ahora exclusivamente a la iglesia anexa al convento de Santiago.

El arreglo provisional se ha producido tras la pasada visita al barrio del Realejo. El concejal de Mantenimiento, Francisco Almohalla, explica que pudieron comprobar el estado de las arquetas y que los vecinos y comerciantes les confirmaron su mal estado.«Nos comentaron que hace bastantes años que vienen padeciendo un tremendo ruido, que pudimos comprobar in situ».

Mantenimiento abrió las dos arquetas. La más peligrosa (en el nº32) no tenía cableado por lo que su eliminación es más sencilla. La arqueta del nº 41 fue abierta y sí tiene cableado, «por lo que eliminarla puede conllevar más trabajo y cierto peligro de dañar la fibra».

El edil explica la situación. «La responsable de las arquetas es Orange, que absorbió Jazztel en 2014, sigue sin dar ninguna respuesta a nuestros correos, y hay muchísimos avisos enviados». En todo caso, prosigue, la ordenanza de canalizaciones exige a las compañías la disponibilidad de un email para las incidencias y la actuación en 24 horas.

«Hemos hablado para ver cómo proceder sin que nos podamos ver ante un problema por dañar su infraestructura y estamos preparando un último escrito justificando nuestra actuación por peligro inminente ante la falta de actuación por parte de Orange». Así, el pasado jueves se envió el comunicado a Orange y el lunes se anularon y cubrieron con asfalto las dos arquetas.

La actuación es provisional, «pero ya elimina el ruido tan molesto durante tanto tiempo a los vecinos. No es la mejor solución, es solo temporal, puesto que requiere el corte de la calle varios días, y para el colegio del Rosario que hay en la misma calle es un trastorno muy grande, por lo que en el periodo estival se podrá cortar y ejecutar con adoquines y empedrado».