Buscan a un hombre y una mujer por su relación con el asesinato de un vecino de Santa Fe

Según consta en un auto judicial, con fecha del pasado 24 de septiembre y vigencia de cinco años, del contenido de las diligencias practicadas aparece la existencia de un presunto delito de homicidio derivado de la supuesta acción delictiva de estas dos personas, un hombre y una mujer. Es decir, que estas dos personas podrían estar presentes en el momento en el que se secuestró al vecino de Santa Fe, en el lugar en el que apareció asesinado o en ambos escenarios del crimen.

La Guardia Civil de Granada ya detuvo este pasado 10 de septiembre a un individuo que está, presuntamente, relacionado con el secuestro y asesinato de este vecino de Santa Fe cuyo cadáver apareció en Huétor Santillán. El sujeto en cuestión, que fue capturado en la localidad malagueña de Mijas, fue encarcelado tras comparecer en un juzgado de la capital, según la información facilitada por el letrado de la víctima, el abogado Carlos Aránguez.

Además, el jurista detalló a IDEAL que, en julio de este mismo año 2024, las fuerzas de seguridad detuvieron en distintos puntos de España a otros tres hombres por su supuesta participación en el crimen de Huétor Santillán, pero todos ellos quedaron en libertad. Los cuatro sospechosos son de nacionalidad extranjera.

En este último arresto, fueron claves las escuchas telefónicas y las características del vehículo que fue utilizado por los presuntos homicidas el día de los hechos.

La investigación del caso fue declarada secreta por el juzgado de instrucción que asumió las pesquisas, un circunstancia que favoreció que la Guardia Civil pudiera trabajar con absoluto sigilo. Casi cuatro años después del suceso, los agentes del instituto armado han podido arrojar luz sobre un asesinato que parecía haber caído en el olvido.

El cuerpo del fallecido fue encontrado por una pareja de ciclistas cerca de la autovía A-92, en las estribaciones de la Sierra de Huétor Santillán alrededor de las diez de la mañana del 23 de diciembre de 2020. Tenía las manos atadas y presentaba numerosos golpes en la cabeza. Los secuestradores también le había tapado la boca con cinta americana.

Según el relato de los hechos del abogado de la familia del asesinado, este fue raptado el día anterior a su muerte en las inmediaciones del cementerio de Santa Fe, localidad en la que residía. «La víctima fue abordada por un número indeterminado de individuos, que lo introdujeron contra su voluntad en una furgoneta y lo mantienen secuestrado durante un tiempo aproximado de unas 20 horas. Transcurrido este tiempo, fue hallado su cadáver amordazado y atado de pies y manos, presentado heridas inciso contusas», detalló Aránguez los pormenores del suceso.