El desprendimiento en la A-7 en Castell de Ferro obliga a vaciar los depósitos de agua de regadío

El desprendimiento de ladera que ha supuesto el cierre del carril derecho de la A-7 a la altura de Castell de Ferro ha provocado también que se vacíen dos depósitos de agua para regadío que hay en la cabeza del desmonte. Según han informado fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Granada, por las lluvias importantes en la costa este corrimiento de tierra ha causado movimientos en los depósitos, de forma que uno de ellos se vació como consecuencia del mismo y otro más, el contiguo, se ha vaciado preventivamente.

Además de las lluvias en la costa de esta semana, se esperan más precipitaciones a partir de este lunes 13. El desprendimiento de ladera se ha producido en el kilómetro 354 de la A-7 el Viernes Santo y todavía afecta este domingo a la autovía. Concretamente, se han cerrado 500 metros del carril derecho. Desde entonces, técnicos de Fomento están en la zona por si hubiese que tomar nuevas medidas para garantizar la seguridad. El desprendimiento afectó a un invernadero y a un camino que habitualmente utilizan los agricultores.

Los caminos de acceso a la zona, que tenían grandes grietas, fueron precintados por la Guardia Civil, que prohíbe el acceso a las fincas.