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La Estación de Autobuses de Motril se encuentra en una situación «preocupante» tras las intensas lluvias de las últimas semanas. Goteras en el techo, desperfectos ... en los aseos, filtraciones en la sala central y acumulaciones de agua en el suelo son los problemas que afectan al recinto y hacen «imposible» su funcionamiento estos días.
Ante esta situación, el Ayuntamiento de Motril, exige a la empresa concesionaria que acometa de «inmediato» las reparaciones necesarias. «La estación de autobuses es un punto clave de la movilidad en nuestra ciudad y no podemos permitir que se deteriore de esta manera. Hemos notificado a la empresa encargada en varias ocasiones que deben asumir su responsabilidad y actuar con urgencia», declaró el teniente de alcalde de Movilidad y Transportes, José Peña.
Según informó, la infraestructura se construyó en 2016 y desde su puesta en marcha ha sido gestionada por una empresa concesionaria a través de un contrato de explotación. En este acuerdo, tal y como recordó el Ayuntamiento, se establece «con claridad» que la empresa adjudicataria es la responsable del mantenimiento, la conservación y la limpieza de las instalaciones, así como de garantizar su seguridad y salubridad.
Entre los daños se encuentran goteras en distintas partes del edificio, especialmente en la sala central, los aseos y la cafetería, donde las filtraciones han deteriorado el techo y han provocado desprendimientos en algunas zonas, detalló Peña. Además, la acumulación de agua en el suelo supone un riesgo de resbalones y caídas para los usuarios.
Por su parte desde la compañía Alsa destacó que Nex Continental, como empresa gestora de la Estación de Autobuses de Motril, detectó en el mes de enero el deterioro en la cubierta de la estación por lo que solicitó de forma inmediata un informe técnico para comprobar la causa y posibles soluciones al respecto.
Dicho informe técnico, que fue puesto a disposición y obra en poder del Ayuntamiento de Motril, concluye que el deterioro de la cubierta y los sucesivos desperfectos que sufre el edificio se deben a deficiencias estructurales en el diseño original de la edificación y no a la falta de mantenimiento. Estas deficiencias han provocado múltiples goteras activas que se distribuyen por la estación.
En sus conclusiones y propuesta de intervención, el citado Informe Técnico ofrece dos alternativas para solventar estos fallos estructurales, una más ambiciosa y definitiva y otra más a corto plazo supondría un arreglo temporal.
Para minimizar cualquier tipo de posible riesgo de todas las personas usuarias de la infraestructura, se ha procedido a acotar y señalizar convenientemente los espacios afectados, a la espera de una propuesta de solución.
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