Daños en los caminos de las fincas de los agricultores de Otívar. MJAT

El colapso de la sima de Otívar provoca daños de más de 10.000 euros a los agricultores

La mezcla de aguas residuales y pluviales arrasa bancales, mientras el Ayuntamiento asegura que la agrupación de vertidos «está en marcha»

MJ Arrebola

Granada

Martes, 4 de febrero 2025, 23:44

Los agricultores de Otívar enfrentan un problema que lleva décadas sin resolverse y que, cada vez más, amenaza sus tierras. Los vertidos residuales del pueblo, mezclados con las aguas pluviales, desbordan una sima, una especie de sumidero natural donde se acumulan los darros, arrasando con ... bancales de aguacates y chirimoyos, provocando daños de miles de euros.

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Tras más de 30 años padeciendo estos problemas, los agricultores están «cansados» de esperar soluciones que no llegan. Es el caso de Antonio Ruiz, uno de los agricultores afectados por las últimas lluvias. «Más de la mitad de la finca se ha ido cuesta abajo. Lo que antes eran bancales ahora es un terraplén«. Los agricultores como Antonio, han tenido que ver cómo los caminos hasta sus árboles quedan prácticamente «inaccesibles», con piedras y barro por todas partes.

«Para poder coger los aguacates tengo que ir saltando por las piedras», explica. Las intensas lluvias del pasado noviembre fueron la gota que colmó el vaso, pero el problema viene de mucho antes. «Con esta situación llevamos décadas pero cada vez llueve más fuerte y ahora, además de los darros, han metido también el agua de lluvia en las mismas tuberías. Ahora todo se mezcla y cuando cae una pequeña tormenta, esto se convierte en un desastre». Cuando llueve, el volumen de agua sobrepasa la capacidad de la sima, provocando que el agua sucia rebose y se desplace ladera abajo, destrozando todo a su paso.

Solo en la finca de Antonio Ruiz, los daños ascienden a 12.000 euros. «Ese es el presupuesto que me han dado para reparar mis bancales y los caminos», explica. «Pero, ¿de qué sirve arreglarlo si con la próxima lluvia volverá a pasar lo mismo?», se pregunta el agricultor.

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La misma tubería

Lo que agrava aún más la situación es que las recientes obras de mejora en el pueblo han seguido conectando las aguas pluviales a las mismas tuberías que transportan los residuos urbanos. «Si ya se están haciendo obras nuevas, lo suyo sería que fueran dos tuberías separadas, una para las pluviales y otra para los residuos. Pero no, todo va junto y por eso revienta», explica Ruiz.

El problema principal, según los vecinos, es que en el municipio no cuenta con una depuradora y, aún así, señalan que «pagamos en nuestras facturas del agua un concepto destinado al tratamiento de aguas residuales y la realidad es que el sumidero, un antiguo depósito de vertidos, es el único punto de recogida de todas las aguas del pueblo».

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Además, los agricultores señalan que la «destrucción» de bancales y cultivos no solo significa pérdidas económicas, sino también el peligro de que la tierra se vuelva «improductiva» con el tiempo. «El agua no solo arrastra la tierra, sino que contamina el suelo con los residuos», advierten.

Los agricultores de Otívar tienen claro que la única solución es la construcción de una depuradora y la separación de las redes de saneamiento y pluviales. «En los tiempos que estamos, esto no debería estar pasando», señala Antonio. «No podemos seguir con un sumidero que se desborda con cada lluvia. Es un peligro ambiental y un desastre económico para quienes vivimos de la tierra».

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Agrupación de vertidos

Desde el Ayuntamiento de Otívar, el alcalde Paco Robles destaca que la solución a los vertidos de Jete, Otívar y Lentegí, «está en marcha». Según informa, se está llevando a cabo el proceso de licitación del proyecto de agrupación de vertidos, que tiene como objetivo principal canalizar las aguas residuales de estas localidades hacia la estación depuradora de Almuñécar. Tras años de espera, el problema ve por fin la luz. «Somos conscientes del malestar de los agricultores, esperamos que pronto se licite la obra», añade.

Rafael Caballero, presidente de la Mancomunidad de Municipios de la Costa Tropical, explica que el Ayuntamiento de Almuñécar ha iniciado las expropiaciones necesarias para este proyecto, y, los próximos 24 y 25 de febrero se celebrará el acto de expropiaciones en la Casa de la Cultura de Almuñécar. Además, Caballero destaca que ya se han realizado el pago del 5% de las expropiaciones. «Es cuestión de lo que dure la licitación y la obra, pero ya es un problema que se va a solventar pronto», concluye Caballero.

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