El conductor fallecido ayer en la A-44 era párroco del Valle de Lecrín y capellán del hospital de Motril

Don Felipe también fue párroco de Arenas del Rey durante ocho años y prestó servicio en Fornes y Jayena, donde sus vecinos lo recuerdan con cariño. De hecho, fue pregonero de las fiestas de Fornes en 2019. Las parroquias del Valle de Lecrín han querido despedirse de su párroco «con gran pesar». «Su repentina muerte nos llena de tristeza, aunque nos queda el consuelo de saber que la muerte no tiene la última palabra sobre nosotros. Nos queda su cariño, su cercanía y su entrega que supo hacer visible el amor de Dios en las cosas cotidianas de la vida. Desde estas líneas le queremos dar el pésame a sus familiares y amigos y cómo no, a todos los feligreses de los pueblos de Albuñuelas y Saleres de donde era párroco actualmente», han asegurado a través de un comunicado.

Por su parte, el Arzobispado de Granada ha anunciado que el velatorio será este lunes 25 de abril de 2022 a partir de las 11:30 horas en la parroquia de Santa María Micaela, en La Chana y la eucaristía funeral se celebrará en esta misma parroquia a las 18:30 horas. Don Felipe era natural de Montejícar, se ordenó sacerdote el 19 de junio de 1991. Empezó como vicario parroquial en Murchas y desde entonces ha prestado servicio en numerosos pueblos de la provincia, entre ellos Albuñol, Motril, Riofrío o Ízbor. Desde 2016 fue nombrado capellán a media jornada en el hospital motrileño, donde destacan que era una persona agradable, cariñosa y atenta.