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CLUB DE ACTIVIDADES SUBACUÁTICAS LA ESPERA

Las grandes criaturas marinas que se acercan a la Costa de Granada

Los bancos de zooplancton y el descenso de actividad marítima, atraen al tiburón peregrino a las aguas granadinas, zona de paso de otras especies de peces y cetáceos

Lunes, 25 de mayo 2020, 01:09

Una extensa sombra del tamaño de un barco de recreo se mueve por debajo de la superficie del agua. Su silueta es inconfundible. Un gigante en el mar. Se acerca a la superficie, su gran aleta corta la respiración de los piragüistas que reman cerca. El animal abre sus fauces y… falsa alarma. Es inofensivo, pese a ser, por detrás de las ballenas, una de las criaturas más gigantescas que atesoran los océanos. Sus dientes aserrados y pequeños apenas son perceptibles a simple vista. Un tiburón peregrino (Cetorhinus maximus), de ocho metros de longitud, se pasea desde hace varias semanas por las aguas del litoral.

No es la primera vez que ejemplares de esta especie visitan la costa de Granada. Hace un par de años fue avistado uno en la bahía de La Herradura, pero no tan cerca de la orilla como ahora.

La llegada de la primavera, con el sol más alto y los días más largos, junto al aumento de nutrientes en la superficie, después de los temporales de poniente, favorecen la producción de fitoplancton, algas unicelulares que sirven de alimento a unos pequeños crustáceos conocidos como copépodos y que junto a otros animales forman parte del plancton animal (zooplancton).

Vídeo. La Guardia Civil avista un tiburón peregrino de más de ocho metros frente a una playa de Granada. IDEAL

Luis Sánchez Tocino, zoólogo, experto en biología marina y coordinador de la página web de la UGR https://litoraldegranada.ugr.es, explica que no es inusual, aunque sí poco frecuente, ver a estos peces en aguas granadinas. «Estos tiburones están continuamente viajando, por eso se les conoce como peregrinos, normalmente algo alejados de la costa, pero la presencia de gran cantidad de estos pequeños crustáceos en nuestro litoral, ha podido ser uno de los motivos de que se acerquen a la costa y permanezcan tranquilamente alimentándose a escasos metros de nuestras playas», explica.

«Los peregrinos pueden medir hasta 15 metros de longitud, aunque su talla normal no supera los 9 metros, y no es la primera vez que se han detectado en Granada. En Salobreña o en La Herradura se les ha localizado otros años», dice.

En las últimas semanas ha habido tres avistamientos de estos animales marinos. El descenso en el tráfico marítimo y la parálisis que ha sufrido la actividad en las ciudades costeras, donde apenas se ha hecho vida cerca del mar, podría dar que pensar que ha sido una de las razones que han llevado a estos animales a acercarse más a la orilla. Sin embargo, el profesor Sánchez Tocino piensa que más que la ausencia de ruido es la presencia de comida lo que ha hecho que estos animales permanezcan en la zona.

Vídeo. El vídeo de un gran tiburón en la playa de Calahonda. IDEAL

«La navegación deportiva en la costa granadina está prácticamente concentrada en los meses de verano. Por lo que a pesar de que durante la cuarentena ha podido descender el tráfico marítimo, éste no es nada significativo. Además una parte de la flota pesquera ha seguido faenando.

En los vídeos que se pueden ver en las redes sociales, se observan embarcaciones con los motores en marcha, algunas de gran tamaño como las patrulleras de la Guardia Civil, muy cerca de los tiburones, y éstos siguen tranquilamente alimentándose», manifiesta. Sin embargo, el profesor Pedro Sánchez, catedrático de biología de la Universidad de Granada (UGR) y Director del Aula del Mar, indica que la reducción de ruidos de motores en el agua ha podido ayudar a que estos ejemplares se sientan más cómodos a pocos metros de la arena.

Los expertos mantienen que los tiburones avistados en Calahonda, Motril o La Mamola podrían tratarse del mismo ejemplar, aunque Tocino apunta que, «aunque no es lo habitual, estos individuos a veces viajan en pequeños grupos. Las observaciones apuntan a un ejemplar de cuatro metros y otro de ocho».

Atún rojo

Además del tiburón peregrino, la Costa de Granada es zona de paso para especies como el atún rojo que se reproducen en aguas de Sicilia, cetáceos como las ballenas, que pasan lejos, o los delfines. Además, de unas 30 especies de tiburones que viven en el mar de Alborán.

Hace años, era más frecuente la captura de tiburones por parte de los pescadores profesionales y deportivos. «Cada vez es más difícil encontrar tiburones por la sobrepesca y porque son criaturas con una reproducción lenta y compleja. La población de algunas especies de escualos en el Mediterráneo es tan escasa que está prohibida su pesca. Es importante cuidar la biodiversidad de las aguas. Dos meses de reducción de la actividad humana no se aprecian en un entorno en el que el ser humano ha tenido mucho impacto», lamenta el biólogo. «Nosotros somos los depredadores para los tiburones», concluye con rotundidad.

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