Los empresarios de la Costa afrontan con incertidumbre el cierre de hostelería y comercios a partir de mañana. La comarca, que ya estaba muy tocada por los cierres perimetrales que han dejado la planta hotelera casi cerrada, se enfrentan ahora a unas restricciones aún más ... duras y sin tener claro cuál es el horizonte.
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Los chiringuiteros ya habían notado y mucho el freno de la movilidad. El 70% de los negocios había cerrado ya sus puertas. El presidente de la asociación de los empresarios del sector, Paco Trujillo, afirma que esta nueva bajada de persina hará que la facturación anual caiga alrededor del 45%, y eso que el verano fue mejor de lo que esperaban.
Poca esperanza tienen también los comerciantes de Almuñécar, que a las puertas de la campaña navideña, temen que esta situación complique aún más la competencia de las ventas online. Desde la asociación de comerciantes motrileños piden a los ciudadanos apoyo para los negocios locales, en un momento en el que lo necesitan más que nunca, y respeto a las restricciones para intentar que las medidas puedan levantarse cuanto antes.
Por su parte, los hosteleros de la Costa se siente atacados y decepcionados. No esperaban un cierre total y a muchos les ha pillado con el género comprado. REcuerdan que han hecho una importante inversión en los últimos meses para garantizar la seguridad y lamentan que una vez más sean los que más pierden.
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