La Policía blinda los accesos a la Costa de Granada por un posible éxodo en el puente

Al igual que ocurrió ya el pasado fin de semana, cuando los bares de la Costa habían abierto sus puertas mientras que en el resto de la provincia seguían cerrados, los ayuntamientos han hecho un esfuerzo extra para controlar la entrada de personas a sus términos municipales.

La responsabilidad individual es clave, como vienen ocurriendo desde hace meses, porque es imposible controlar el 100% de los movimientos. Pero para los que piensen en saltarse la normativa, el riesgo de llevarse una multa, al margen de las consecuencias que esos movimientos puedan tener para la situación sanitaria, está ahí.

Poco o nada va a parecerse este puente de diciembre, que se extenderá cuatro días, al de cualquier otro año, salvo en que será, como otras veces, un ensayo previo a la Navidad, eso sí, a una Navidad que también va a ser diferente.