La Policía de Motril 'caza' a un vecino que paseaba con una barra de pan duro como excusa para salir a la calle

La Policía de Motril sigue trabajando para evitar que los ciudadanos se salten las restricciones para salir a la calle que se instauraron con el decreto del estado de alarma por la crisis del coronavirus. Ayer se pusieron treinta sanciones. Fueron la mitad que el lunes. Entre los casos, los agentes se encuentran algunos que son, cuando menos curiosos. Es el caso de un vecino que afirmó que había salido a comprar el pan. Cuando los policías fueron a comprobarlo se dieron cuenta de que la barra que llevaba en la bolsa «estaba dura como una piedra».

La gente agudiza el ingenio en esta situación de aislamiento, pero los policías cada vez están más avispados y ya se saben casi todas las excusas. Comos a los que ven sacar al mismo perro diez veces en un mismo día (el número de veces no es exacto) o a los que ya han tenido que advertir más de una y de dos veces que hay que evitar salir.

La teniente de alcalde de Seguridad Ciudadana, Mara Escámez, deja claro que los policías van a estar «donde menos se imaginan» los ciudadanos. Es una de las formas de intensificar la vigilancia, ir a aquellos puntos en los que no los esperan, mientras siguen también en los lugares habituales.

La plantilla está haciendo un enorme esfuerzo que desde el Ayuntamiento se agradace. Escámez insiste en que es imprescindible que los ciudadanos respeten las restricciones marcadas porque será beneficioso para todos.

Sobre la reducción de las sanciones, de 66 el lunes a 30 el martes, la responsable de Seguridad Ciudadana confía en que detrás haya concicenciación, pero apunta que el mal tiempo también ayuda. «Esta mañana por ejemplo apenas han puesto sanciones, pero hay que tener en cuenta que está lloviendo», apunta.

En cualquier caso, Escámez recalca que van a seguir extremando la vigilancia para evitar que haya gente en la calle y que habrá especial atención en aquellos barrios en los que se ha detectado que se producen reuiones.

La colaboración de vecinos que están llamado a la Policía para avisar que en algunos espacios hay personas en la calle está siendo importante para encontrar este tipo de comportamientos.

Desde el 16 de marzo, la Policía Local de Motril ha interpusto un total de 278 sanciones. El número es elevado y desde el consistorio insisten en que hay que quedarse en casa por la protección de todos.