Los vigilantes de la playa de la Junta ya están en la Costa granadina

Los auxiliares de playa de la Junta ya se han incorporado a sus puestos en las playas granadinas. Después de recibir la formación correspondiente, los 280 vigilantes han recogido esta mañana sus uniformes y han recibido los cuadrantes con los horarios y turnos que tendrán que cumplir a lo largo de los próximos tres meses. Hasta el próximo 15 de septiembre se encargarán de informar sobre las nuevas normas de uso de las playas puestas en marcha este verano como consecuencia de la crisis sanitaria del coronavirus.

Estos vigilantes que estarán en todas las playas de la comunidad fueron una de las medidas anunciadas por la Junta para conseguir que las playas andaluzas sean este veran más que nunca sinómino de seguridad. Los auxiliares no podrán sancionar, su labor será únicamente de información. En el caso de que se produzca algún conflicto se limitarán a dar aviso a Protección Civil o a la Policía para recibir apoyo. En cualquier caso, su función es recordar a los bañistas que aunque a ratos dé la sensación de que todo sigue igual que siempre, lo cierto es que la amenaza de la Covid-19 sigue ahí y es imprescindible que los ciudadanos sean precavidos para evitar que se produzcan rebrotes.

En horario de nueve de la mañana a cuatro de la tarde y de tres de la tarde a diez de la noche, en dos turnos y por parejas, estos vigilantes recorrerán pequeños tramos de las playas para comprobar que nadie se salta las normas. Este año habrá que mantener las distancias, no se permitirá la colocación de chambaos pero sí de sombrilla y tampoco estará permitido realizar juegos en grupo como las palas o los partidos con balón en la arena. También habrá que respetar una línea de seguridad entre la orilla y las primeras sombrillas. Son algunas de las reglas obligatorias para poder disfrutar del verano. Los aforos también tendrán que controlarse para evitar las masificaciones.

Los vigilantes estarán trabajando de lunes a domigo. Es más, los fines de semana será cuando habrá más presencia, algo lógico teniendo en cuenta que son las jornadas de más afluencia en la costa.

Si los ciudadanos cumplen con las limitaciones la labor de estos auxiliares será relativamente sencilla. La responsabilidad personal será clave para que el uso y disfrute de las playas no traiga aparejados problemas. El verano pinta mejor de lo que se esperaba hace unos meses, pero no hay que perder de vista que aunque a eces se nos olvide, la vida todavía no es igual que antes de la llegada del virus.