Cuatro agresiones a vigilantes de seguridad de hospitales granadinos en menos de una semana. Una lacra cada vez más frecuente sobre la que ponen el foco los sindicatos, que piden más medidas y concienciación a la ciudadanía. El primer ataque, según informan fuentes de ... UGT, se produjo el pasado jueves, 17 de noviembre a las 23.00 horas, en el Hospital Universitario Clínico San Cecilio, cuando al parecer una paciente «agresiva y alterada» arañó a dos vigilantes. La mujer estaba alterando el orden e increpando a pacientes, personal sanitario y personal de seguridad con amenazas verbales.
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A la mañana siguiente, en torno a las 8.00 horas en el mismo hospital, un vigilante de la empresa Securitas fue agredido por un paciente agresivo. Uno de ellos recibió un bocado y el otro moratones por golpes. Según señala CSIF Granada, que ha interpuesto denuncia ante la Policía, un celador solicitó a un usuario del área de Urgencias que se pusiera la mascarilla para estar en las instalaciones sanitarias. En ese momento, el individuo comenzó a insultarle en un «claro estado de alteración», lo que hizo que el vigilante que se encontraba en la zona mediara, resultando herido con un mordisco en la pierna.
Ese mismo día, el pasado viernes, 18 de noviembre, UGT señala que se produjo otra agresión, esta vez en el Hospital de Neurotraumatología y Rehabilitación. En torno a las 22.50 horas, un vigilante de seguridad fue atacado por una paciente agresiva, causándole un esguince en la muñeca.
La agresión más reciente se produjo este lunes, 21 de noviembre, cuando al parecer un usuario de la Unidad de Salud Mental del Hospital Universitario Virgen de las Nieves amenazó al personal de seguridad. Según señala UGT, sobre las 19.10 horas el paciente trató de golpear al personal sanitario. Los vigilantes, tratando de evitarlo, sufrieron «lesiones por arañazos».
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Estos episodios se suman al registrado hace dos semanas, el pasado 11 de noviembre, cuando unos vigilantes de la empresa Securitas se lesionaron al detener a una persona que intentaba golpear a un médico en el Clínico.
Los sindicatos condenan este tipo de actos violentos, cada vez más frecuentes, que afectan especialmente a la atención primaria y las urgencias hospitalarias. Reclaman mayor concienciación ciudadana y nuevas medidas que tengan en cuenta no solo al personal sanitario, sino a todos los profesionales que desempeñan su labor dentro de estos edificios, como es el caso de los vigilantes de seguridad privada.
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