Sábado, 12 de septiembre 2020, 00:13
En la residencia de mayores de San Juan de Dios, en la capital, se ha originado un brote con siete personas contagiadas, de las que cuatro se encuentran actualmente hospitalizadas.
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Tal y como ha podido saber este periódico de fuentes sanitarias, fue una trabajadora ... la que dio la voz de alarma en forma de positivo. Tras aislarla se siguió el protocolo habitual, que incluyó la realización de unas pruebas entre los residentes que resultaron ser negativas. Si bien, unos diez días después, a dos profesionales les dio la cara la enfermedad, por lo que se amplió el radio de los análisis hasta que se pudo detectar el virus en otros cuatro residentes. Siguiendo las premisas marcadas por el distrito sanitario, los usuarios contaminados fueron trasladados, en este caso, al Hospital de San Rafael, donde permanecen a día de hoy «tranquilos y estables», según las mismas fuentes.
Respecto al resto, los trabajadores con positivo están pasando la enfermedad en su casa, y los usuarios están de momento en las dependencias de un centro residencial que está sectorizado para evitar que el virus se propague entre aquellos que han tenido menos contacto con los positivos. Con más posibilidades o menos, todos están aislados dentro de un recinto en el que se prohibieron las visitas de familiares justo antes de verano a modo de prevención tras los primeros casos detectados en la 'nueva normalidad', según fuentes de la Orden de San Juan de Dios.
Según informó esta semana la Junta de Andalucía a través del BOJA, actualmente hay cinco residencias de mayores en la provincia que tienen positivos. El centro Fardes, en Benalúa, es el que presenta un mayor índice de contagios, alrededor de una veintena.
Pero hay más malas noticias. Granada ha sumado en las últimas 24 horas 143 positivos, tal y como informó ayer la Consejería de Salud y Familias a través del parte diario.Esta cifra es la segunda más alta de la pandemia y desde luego muy superior a la del día anterior, cuando se contabilizaron 76 nuevos casos.
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Asimismo, la presión hospitalaria sigue subiendo. En el último recuento se han añadido una decena de ingresos hospitalarios, de los que solo uno tuvo que ser en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Con este paciente, ya son once los que se encuentran con un cuadro grave provocado por la Covid-19. Por contra, la buena noticia es que en Granada se le pudo dar el alta en el último día a una decena de personas. Además, no hubo que lamentar muerte alguna.
Y todo esto en un contexto preocupante. Andalucía registró ayer un nuevo récord diario con 1.242 positivos, 265 más de los contabilizados el día anterior. Para más inri, sumó siete fallecidos. Según los datos, Málaga volvió a ser la provincia con peores registros: 478 nuevos casos en un día.
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