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La Archidiócesis de Granada no tiene ninguna relación con Iván M. P., el motrileño de 35 años detenido en Venezuela por presuntos abusos a una menor de 12 años. Fue ordenado diácono -auxiliar de sacerdotes y obispos- en el año 2008, en territorio de ... Granada, pero por la propia orden de los Agustinos Recoletos. No recibió una ordenación sacerdotal por parte del Arzobispado de Granada. Es decir, su 'nombramiento' religioso fue interno y la autoridad eclesiástica de Granada sólo tuvo conocimiento del mismo y de su traslado a Venezuela.
Se trata de un sacerdote religioso, no diocesano. A grandes rasgos, los sacerdotes religiosos pueden celebrar los sacramentos, pero no están 'inscritos' a una diócesis -en este caso sería la Archidiócesis de Granada- sino a una comunidad, los Agustinos Recoletos. Ésta, junto con la Archidiócesis de Maracaibo, acordó suspender su ejercicio del ministerio sacerdotal tras salir a la luz los presuntos abusos sexuales a la menor en esta localidad venezolana.
El Arzobispado se desmarca así de cualquier relación con el detenido, salvo la comunicación de su traslado a Venezuela, algo estipulado en el Derecho Canónico. Desde el Arzobispado aclaran que la orden religiosa de los Agustinos Recoletos tiene «autonomía propia en sus decisiones y depende de sus superiores», por lo que el nombramiento de 2008 no implica que Iván M. P. tuviera ningún «cargo pastoral» en la diócesis granadina.
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