Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
La asociación de vecinos Realejo, San Matías, Santa Ana y Barrio de la Virgen, como le gusta decir a su presidente, Alejandro Corral, acumula en estos meses de pandemia un centenar de peticiones, ruegos y preguntas que resolver cursadas al Ayuntamiento de Granada. Entre todas ellas, hay diez de ellas que forma un decálogo de puntos negros que merecen una solución urgente.
Los problemas en la Cuesta del Perro Baja se llevan la palma y es el primero de los puntos negros. Hay botellón y surgen conflictos con los vecinos de la calle. «Para evitar estos problemas se necesita que sean eliminados los pretiles de obra de las escaleras y que sean sustituidos por barandas», pide la asociación vecinal.
En segundo lugar se encuentra el Mirador de Almanzora, en el barrio de la Churra, donde la práctica totalidad de los vecinos de las dos calles han firmado un escrito en el que se denuncia la inseguridad ciudadana y los robos en viviendas, y botellón en el mirador.
De lugares bellos va la ronda y en tercer lugar aparece el Lavadero de la Puerta del Sol. Se denuncia una vez más el estado del lavadero en sí, «aunque ya está licitada la obra». Eso sí, «al ser el único ejemplo en la ciudad que queda de esta tipología arquitectónica, necesita tener una figura de protección de la construcción, inscribiéndose primero en el catálogo de elementos singulares, y después, abriendo el expediente para que sea declarado BIC», solicitan los vecinos del Realejo.
En cuarto lugar se coloca el parque del Cuarto Real de Santo Domingo, un desaguisado completo. Pese a estar cerrado al público con unas verjas de malla, ayer mismo había al menos media docena de personas en él. El estado del parque, en cualquier caso, es lamentable. Está sucio, sin agua en sus estanques, con las papeleras a rebosar de botellas de cerveza, lleno de excrementos de perro y pintadas. Las maderas de parte del suelo, que iban a ser el símbolo de este 'parque estilo zen', están completamente deterioradas.
En quinto lugar aparece un tema «del que habla todo el mundo en el barrio», comenta el presidente vecinal. Se trata del tráfico en el eje Pavaneras–Molinos, que ya ha sido motivo de varias manifestaciones, multitud de protestas y quejas. «Se dijo en junio que el concejal del ramo se reuniría con nosotros para explicarme las nuevas medidas a tomar. Y estamos en marzo», denuncian.
La sexta posición son los problemas con la recogida de residuos. «La normativa marca que cada edificio tiene que tener su contenedor, pero como la mayoría de los edificios son pequeños o unifamiliares, no tienen por el coste de tener que pagar a alguien para que saque y meta el cubo. Entonces ponen la basura en las esquinas». Por ejemplo, en el barrio de la Virgen o en mitad de la calle, como en la calle Ánimas y Gomérez, o placeta de la Miga.
El séptimo lugar es para los 'okupas'. Hay un edificio sin terminar en la calle Santiago y otro viejo en Plegadero Alto que pueden llegar a albergar hasta doce personas entre los dos, con los problemas añadidos de higiene, contagios, inseguridad ciudadana y tráfico de drogas, confirman fuentes de la Policía Nacional.
Un problema al alza, este es ya el octavo problema del barrio del Realejo, es la inseguridad ciudadana. La asociación de vecinos habla de la proliferación de tirones, de robos en diversos locales comerciales y también en viviendas particulares. «Por tanto, creemos que hay una verdadera necesidad de mayor presencia policial en las calles del barrio».
Más de veinte de los ruegos o preguntas tratan de la falta de arbolado o de solicitudes de poda de matorral. Por ejemplo, en la calle Alamillos de San Cecilio se pide que las plantas 'ailanthus altissima', conocida como pestoso o árbol del cielo, considerada especie exótica invasora, sea eliminada. Al revés, en la calle Solares, en el tramo de reciente apertura junto al residencial Tres Caídas, se pide que se planten árboles».
En último lugar, el décimo, pero no el menos importante, se encuentra el problema del Campo del Príncipe, donde se denuncia la presencia de personas sin hogar que duermen en los parterres, «donde tienen como práctica normal consumir alcohol, estupefacientes, llegándose el caso de copular en la vía publica, a dos metros del parque infantil que existe en dicho lugar», según denuncia presentada en el Ayuntamiento de Granada.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Fermín Apezteguia y Josemi Benítez
Fernando Morales y Álex Sánchez
Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.