Antonio Heredia, Fran Ortiz y Manolo Sastre con Poli Servián, responsable de la Fundación Caja Rural. PEPE MARÍN

Invisibles en Granada

¿Quién tiene discapacidad y quién no?

Caja Rural expone 75 retratos realizados por Fran Ortiz de usuarios y familiares de la asociación Inteligencia Límite Granada, en la que el visitante tendrá que completar una quiniela

Jueves, 27 de junio 2024, 00:55

En la sala de exposiciones de Caja Rural hay setenta y cinco miradas distintas. Setenta y cinco retratos en blanco y negro de personas muy reales. Podrían ser los invitados de una boda. O un club de moteros. O, incluso, enfermos de diabetes. Pero no, ... nada de eso. Los protagonistas de las fotografías son personas con y sin discapacidad. ¿Sabría distinguirlas? Porque, como todo el mundo sabe, la discapacidad se percibe en ciertos rasgos físicos, ¿verdad? Pues no.

Publicidad

«La inteligencia límite es una gran desconocida, por eso es tan importante visibilizarla», dice Antonio Heredia, presidente de la Asociación Pro Inteligencia Límite de Granada. «Una de las características de nuestro colectivo –sigue– es la ausencia de rasgos físicos asociados a su discapacidad, por lo que nuestros usuarios pasan desapercibidos». 'Límite: luz y forma' es, además de una muestra de 75 preciosos retratos realizados por Fran Ortiz, un enorme reto. Al entrar en la sala, los visitantes reciben una hoja, la 'Quiniela Límite', en la que se invita a marcar los retratos en los que aparece alguien con discapacidad. Porque no todos tienen, claro. En las fotos hay usuarios, pero también voluntarios, familiares, amigos o trabajadores de la asociación.

«Por lo que van diciendo los resultados, hay muchos que han votado que yo tengo discapacidad intelectual», sonríe Manolo Sastre, director de la asociación. «En la calle somos personas, no condiciones. A nuestros usuarios te los cruzas por Gran Vía y no te planteas si tienen o no discapacidad intelectual. Y eso queríamos plantear, que no es que sea un colectivo que pase desapercibido por sus rasgos físicos, sino que pasa desapercibido en todos los aspectos. Y no queremos ser invisibles».

Depositando la quiniela al terminar la visita. PEPE MARÍN

Sastre recorre con su mirada las fotografías que se reparten por la sala, fotografías de personas que él conoce muy bien. «Igual que somos conscientes de otros trastornos porque se ven, hay colectivos que no se ven y también necesitan un trato especial».

Publicidad

Una exposición como esta necesitaba un artista capaz de sorprender. Alguien distinto e inesperado. De hecho, así fue como empezó todo: en una boda.

Fuera de lo habitual

Fue en la boda de Nacho e Inma, una de las trabajadoras de la asociación. Manolo Sastre se acercó al altar para hacerle una foto a los novios con su móvil. «Entonces fue cuando Fran me vio y me dijo 'trae, que te la hago yo'. Me quitó el móvil, la hizo y luego siguió con lo suyo», recuerda Sastre. Resultó que Fran Ortiz no era un fotógrafo de bodas cualquiera, era 'el mejor fotógrafo de bodas' (título que ha ganado en varias ocasiones). «Me di cuenta de que Fran era fuera de lo habitual –dice el director de Inteligencia Límite– y le propusimos hacer el calendario de la asociación».

«No lo dudé», continúa Ortiz, alegre. «Me propusieron hacer la foto del calendario anual, pero yo les dije que a cambio quería hacerles un retrato a todos. Y fue algo maravilloso». Así que los 75 retratos son tan naturales porque, en aquel momento, no existía la idea de hacer una exposición. «Cuando estábamos colgando los retratos en la sala –cuenta el fotógrafo–, el vigilante de seguridad se dio cuenta de que yo salía en uno. Entonces me preguntó ¿qué sois, todos fotógrafos? Eso me gustó. Luego subí a Instagram diez retratos y pregunté cuántos tenían discapacidad. La gente alucinó cuando les dije que todos tenían... La de veces que pondremos etiquetas sin conocer a la persona».

Publicidad

La exposición 'Límite: luz y forma' puede visitarse hasta el próximo viernes 28 en Caja Rural, de lunes a sábado, entre las 19.30 y las 21.30 horas. Aunque, a partir de la semana que viene, la idea es llevar la muestra y la quiniela por distintos pueblos de la provincia. «Y que se vea lo que hacemos todas las familias y miembros de Inteligencia Límite Granada», subraya Antonio Heredia, que no puede más que agradecer el apoyo del Ayuntamiento de Granada y de Caja Rural, «sin los que esto no sería posible».

Inteligencia Límite Granada surgió en 1998, impulsado por un grupo de familias con hijos con esta discapacidad. «Cuando nuestros niños salieron del sistema educativo, nos encontrábamos perdidos. Como no había nada específico, fue un 'boom'. Creamos un lugar en el que nuestros hijos pudieran integrarse plenamente en sociedad». La asociación nació con el nombre de 'Borderline', pero en 2020 decidieron cambiarlo por el actual. Hoy cuentan con cuatro trabajadores y ofrecen formación específica, talleres de ocio y tiempo libre y un programa de inserción laboral.

Publicidad

Manolo Sastre, colgando su foto. P. M.

Antonio observa los setenta y cinco retratos que cuelgan por la sala. Luego, guiñando a Fran y a Manolo, sonríe con orgullo. «Esta ha sido la lucha de nuestras familias. Que no fueran niños aparcados, olvidados. Son parte de la sociedad y la discapacidad no se les nota en la cara. No pueden ser invisibles y merecen un trato humano... como cualquiera».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad