La empresa granadina que da vacaciones ilimitadas a sus trabajadores

Ómibu ·
La agencia de marketing tiene una novedosa política de recursos humanos basada en la confianza en su plantilla: «Se van cuando quieren y siempre están descansados»

Mercedes Navarrete

Granada

Sábado, 27 de enero 2024, 00:19 | Actualizado 12:56h.

Conseguir cuadrar unos turnos de vacaciones que contenten a toda la plantilla sin que se resienta el funcionamiento de la empresa es uno de los mayores quebraderos de cabeza anuales a los que se enfrentan los empresarios o directivos de recursos humanos. Un problema del ... que se han olvidado para siempre en la agencia de marketing digital granadina Ómibu gracias a su novedosa política de personal que pasa por dar vacaciones libres a sus empleados. Los 45 trabajadores de la compañía no esperan al verano como quien corre una maratón y cruza la meta, sino que se cogen días de vacaciones a su elección, cada vez que sienten que los necesitan «y siempre están descansados». La empresa granadina cumple el sueño de cualquier asalariado: vacaciones pagadas sin límite. Pero eso sí, hay unas condiciones: avisar con unas semanas de antelación y que el empleado saque su trabajo adelante, cumpliendo unos objetivos «alcanzables». La confianza y una plantilla que responde con responsabilidad son las claves que le están funcionando a esta agencia de marketing integral, responsable de campañas publicitarias como las del Granada CF o los restaurantes La Cueva de 1900.

El joven granadino Aadel Hamad, de 31 años y con ADN empresarial, es el fundador y CEO de esta agencia que ha ido creciendo en facturación y plantilla desde que la creó en 2018. Hamad es un jefe feliz cuando ve que uno de sus trabajadores sale pronto de la oficina: «Si han cumplido su trabajo, yo encantado. No quiero a nadie calentando la silla».

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La idea de las vacaciones ilimitadas se la inspiraron empresas líderes: «Lo hacen en Netflix o Spotify». Y se enmarca en su filosofía de «cuidar a las personas para que ellos nos cuiden. Quiero trabajadores que tengan un salario digno, que sean leales y que hagan equipo». Y además los quiere felices y descansados. «No somos idílicos –asegura entre risas–, en Ómibu somos una empresa con fallos, como todas, pero sí tenemos una obsesión, cuidar al equipo».

Una declaración de intenciones

De hecho, el nombre que eligió para su agencia ya es toda una declaración de intenciones: «En latín, omibu significa todos para bien». Tampoco es que sean una oenegé, es que el joven empresario está convencido de que de la mano de unos trabajadores motivados y felices llegan los resultados. «Un empleado desmotivado no te va a cuidar al cliente y perjudica al resto del equipo. No quiero en la empresa a gente que no sea feliz, o le cambiamos el puesto o que se vaya a otro lado», justifica.

La medida de las vacaciones ilimitadas está resultando todo un éxito y los trabajadores de Ómibu están haciendo un uso de sus descansos más que responsable. Tanto que ninguno de los trabajadores agota los 31 días de forma precipitada. «Para nosotros ha sido una liberación. Cada uno tiene sus circunstancias personales, bien prefieren alargar fines de semana, irse en diciembre, en verano... Cada uno se administra y cumple sus objetivos. El resultado es que han disminuido las solicitudes de vacaciones y, sobre todo, los problemas», resume.

Para 2024 el joven CEO de la compañía quiere dar un paso más y poner en marcha un sistema de incentivos por productividad que permita a cada empleado trabajar según sus aspiraciones vitales. «Hay trabajadores que quieren ceñirse a su horario y otros que quieren más, bien porque quieren aprender o porque necesitan ingresos extra y tienen que poder conseguirlos en su propia empresa, sin buscarse otro trabajo fuera», concluye el empresario.