Francisco Rodríguez, elegido presidente del PP de Granada con un respaldo del 98,5% de los votos

El cónclave del PP, como todos los cónclaves del mundo, ha sido mucho de palabras, pero también de gestos. Como la ausencia del expresidente Sebastián Pérez. Como la intervención telemática de Pablo García, aún convaleciente de la neumonía causada por la covid-19 que le llevó al hospital. Como los codazos donde antes había abrazos. Como las mascarillas. Como la cuidada puesta en escena. O como la intervención desde la lejanía del presidente andaluz Juanma Moreno -finalmente la del secretario nacional, Teodoro García Egea, sí ha sido presencial-. Las aguas no bajan revueltas en el PP de Granada, que culmina de esta forma un proceso de renovación que se inició hace algo más de un año.

Una de las palabras que más se ha repetido este sábado en el PP ha sido 'reto'. Y es que más allá de triunfalismos, los datos están ahí, encima de la mesa. Si nos atenemos a los resultados del PP en las dos últimas generales, por ejemplo, los azules se han dejado por el camino 53.000 votos. Apoyos que han ido a parar a otras siglas del 'bloque de derechas' como Ciudadanos y Vox. Consecuencia de esta pérdida de respaldo, ha sido que se hayan esfumado plazas cruciales para el PP, como la alcaldía de Granada. Fue muy significativo que tanto la consejera de Fomento, Marifrán Carazo, que ha presidido este decimoquinto congreso del PP, como la secretaria general del PP en Andalucía, Loles López, han hablado abiertamente del 'reto' de recuperar la vara de mando en la capital, lo que supone aceptar expresamente que de turnarse con Ciudadanos, nada de nada. Luis Salvador agotará legislatura sin que se escuche ruido de sables en la planta noble del antiguo convento del Carmen.

Francisco Rodríguez ha realizado un discurso de unos veinte minutos donde marcó las líneas básicas del PP en Granada para los próximos cuatro años. Ha empezado hablando de turismo, subrayando la importancia de la Alhambra y de cómo todos los beneficios que genera se están quedando ya en Granada gracias al Plan Alhambra. «Pero Granada es mucho más que la Alhambra», ha afirmado, y tras destacar las potencialidades de los diversos territorios, ha centrado el tiro en Sierra Nevada. Ha hablado de la importancia del teleférico para no colapsar la carretera de la Sierra y la necesidad de ampliar las zonas esquiables a municipios como Güejar Sierra y Dílar para incentivar su economía. También ha reivindicado que el Castillo de la Calahorra esté abierto y sea visitable.

Respecto a las infraestructuras, ha insistido en la relevancia del proyecto ferroviario que una Granada con Motril, aprovechando los fondos europeos, y los corredores Central y Mediterráneo. También ha alabado el trabajo de Marifrán Carazo, consejera de Fomento, respecto a la ampliación del Metropolitano a otros municipios del cinturón, «lo que supondrá más movilidad y menos contaminación». En esta línea de defensa del medio ambiente, se ha felicitado por la apertura de noventa depuradoras de aguas residuales, y ha marcado el interés del PP por que la Vega de Granada no sea baldía y cuente con cultivos rentables que proporcionen empleo y riqueza.

Respecto a la actuación del PP orientada al refuerzo de la propia organización, ha apuntado como uno de los principales objetivos el contar con una estructura en todos los municipios. «Ahora hay sesenta pueblos donde tenemos un concejal o ninguno», ha lamentado. Por eso, ha insistido en la necesidad de apoyar a los portavoces que están en la oposición. En esta misma línea, ha enfatizado la necesidad de redoblar esfuerzos mediante la puesta en marcha de un plan estratégico en las comarcas de Baza, Costa Tropical y Área Metropolitana para ganar la Diputación de Granada, en manos del Partido Socialista. Metas electorales entre las que se encuentra la ciudad de Granada, donde se logró «un resultado muy mejorable». «No podemos tener menos de once concejales; hay mucho margen de crecimiento», ha afirmado.