Ritmo 'granioca' en Río: la vida de un granadino en la capital de la samba

Este granadino de 36 años ha echado raíces en la ciudad donde se celebraron los últimos Juegos Olímpicos, evento que coincidió con «un momento de crisis económica en el que la violencia e inseguridad se avivó mucho», tal y como explica. Es esa desazón constante la que precisamente le impide disfrutar de «poder pasear por la noche sin estar preocupado», una de las cosas que sí echa en falta de su tierra. «Tenemos que valorar lo que tenemos», apunta al respecto.

Los contras de la vida en Río se compensan, y con creces, con los muchos pros que existen. Ni siquiera añora las tapas 'made in Granada', ya que, según desvela, allí «la comida es sensacional y también tienen sus tapas al estilo brasileño». Pero, sin duda, el principal motivo para que Juan María se haya asentado al otro lado del charco es el hecho de haber formado su propia familia. Fue padre en 2017 de un niño nacido en Río, al que él mismo define como 'granioca'.

Como gerente de la filial de una empresa de ingeniería española, nuestro paisano se ha hecho un hueco desde Brasil en la industria naval y de energías renovables. Sin embargo, la vuelta a casa está más cerca de lo que parece. «Tras haber tenido un hijo ese sentimiento de necesidad de buscar un entorno mejor para la familia se reforzó y en breve estaremos en España afrontando nuevos desafíos», avanza.

Mientras que llega ese día Juan María sigue disfrutando de una vida «sensacional y llena de actividades de ocio» en la tierra de la samba. Cuenta que «el estilo de vida carioca es muy similar al granadino en el gusto por la calle, las terrazas y bares y el fútbol». En este sentido, revela que «en Río hacer deporte es casi actividad obligada y el hecho de mostrar cuerpo los 12 meses del año obliga a estar en forma sí o sí».