Un grupo de ultracatólicos exige la dimisión del alcalde de Granada «por satánico»

A las misma hora a la que se había convocado una concentración contra el asesinato machista de Lorena ocurrido ayer en Granada, un grupo de medio centenar de ultracatólicos se ha congregado también en la Plaza del Carmen para exigir la dimisión del alcalde de la capital, Francisco Cuenca, por ser «satánico». Los manifestantes aseguran que hay cruces invertidas en la iluminación navideña y creen que detrás de esa decoración está la mano de Belcebú. Y los culpables de esa «ofensa» serían el propio Cuenca y su equipo de gobierno.

Los participantes en la protesta también cargaron contra el arzobispo de Granada al que consideran un «traidor por haber consentido esta aberración», en alusión a los adornos supuestamente heréticos.

Al final del acto se produjo un momento de tensión cuando varias manifestantes persiguieron al alcalde al grito de «¡cobarde!», si bien el incidente no pasó a mayores. El jefe de la Policía Local, que acompañaba a Cuenca, pidió calma a las mujeres y les deseó «que tengan un buen día». Y ahí se quedó la cosa.

Antes de disolverse, el grupo 'anti satánico', que portaba crucifijos y estandartes con la imagen del niño Jesús, entonó villancicos y rezó un Padre Nuestro.

Entre los integrantes de la protesta ultracatólica estaban los concejales de Vox, que a la vez se sumaron al homenaje a Lorena.

La mayoría de los críticos con la ilumniación navideña respetaron el minuto de silencio por la mujer asesinada por su expareja en el Parque Nueva Granada, aunque también hubo alguno de ellos que gritaron «¡fuera!». Un policía les pidió respeto a la memoria de Lorena y se callaron.

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