Un joven lleva a juicio a la Policía Local tras recibir dos golpes de porra en Ganivet

El enjuiciamiento, según la documentación del caso a la que ha tenido acceso IDEAL, está previsto que se celebre el próximo día 26 en el Juzgado de Instrucción número 9 de Granada, puesto que se ha tramitado como un posible delito leve de lesiones. Y a la vista, de acuerdo con la cédula de citación, están citados seis agentes de la Policía Local de Granada.

El denunciante afirma en su denuncia que uno de los funcionarios policiales le dio en el brazo izquierdo y «casi» no le hizo nada, pero el otro golpe que supuestamente le habría propinado un segundo agente en la pierna izquierda, sí le hizo daño. De hecho, acudió a la Hospital de Traumatología para ser asistido y el centro emitió un parte médico que fue remitido al juzgado.

En el parte figura exactamente que J. M. T. fue atendido por un «traumatismo en el muslo izquierdo». El facultativo, que procedió a vendarle la pierna, le apreció una marca «en la cara lateral del muslo izquierdo longitudinal de unos diez centímetros», así como «inflamación en la zona». También le mandó «reposo varios días» y paracetamol para el dolor.

El altercado que derivó en este otro procedimiento judicial se produjo en la céntrica calle Ganivet sobre las 22.30 horas. Los agentes actuantes, que se encontraban de servicio aquella noche iban uniformados, acudieron en «vehículos con distintivos policiales», según recoge el atestado elaborado por la Inspección Central de Guardia tras comparecer los agentes locales con los dos arrestados.

De acuerdo con la versión policial de aquel incidente, en cuyo marco se habrían producido las lesiones de J. M. T., uno de los hermanos que acabaron detenidos se acercó a los policías «hablándoles a voces» y, como «iba sin mascarilla», le dijeron que se pusiera una antes de que se acercara más. Ante ello, según el atestado, este chico dijo «no me pongo una mascarilla porque no me sale de la polla, sois unos mierdas y unos payasos».

Los agentes están representados por el letrado Domingo Domingo y, en su comparecencia, sostuvieron que el chico que se resistía a cubrirse con el tapabocas se aproximó a uno de ellos y lanzó un «manotazo» que le alcanzó el pecho. Ante tal acción, los policías procedieron a reducir a este joven «no sin esfuerzo, debido a la gran agresividad que presentaba, para lo cual han utilizado la fuerza mínima e imprescindible para poder llevar a cabo la detención».

El atestado explica que cuando tenían reducido a este varón, se empezaron a congregar «multitud de personas en actitud desafiante y amenazante» para tratar de impedir el arresto. Según estos policías, recibieron «empujones», por lo que tuvieron que «hacer uso de las defensas reglamentarias» para garantizar la integridad física de ellos y del detenido, así como para disolver la multitud. Se vieron «rodeados», señala el atestado.

Y es en ese escenario donde se produjo tanto la segunda detención (la del hermano del primer detenido, que supuestamente «arremetió» contra otro agente) como el hecho que será ahora enjuiciado, en el que la defensa de los funcionarios pedirá la libre absolución, según las fuentes consultadas.

El chico que denunció los dos impactos de la porra explicaba en su denuncia que el altercado entre los dos hermanos, amigos suyos, y la Policía se originó después de que en la calle, tras salir de un pub, les hubieran robado a su grupo una botella de ginebra. Tras el hurto, habían preguntado a otros jóvenes si habían visto quién había sido y, según el denunciante, estos les contestaron con una pregunta intimidatoria: «¿Cómo tenéis el vientre para una puñalada?». Fue entonces cuando decidieron comentárselo a los agentes y pasó lo de la mascarilla.