Ayer nevó en Granada. Ayer llovió en Granada. Y también ayer 'cayeron' bicicletas del cielo en Granada. Gracietas a parte, la foto que ilustra este reportaje, una mujer pertrechada bajo su paraguas y un ciclo enganchado a un portalón en la calle Sócrates, es el perfecto resumen del sabotaje que registra el parque de bicis de alquiler desde que se implantaron en la capital hace seis meses las dos empresas asiáticas especializadas en este servicio, Obike y Ofo.
Publicidad
Este 'bodegón' no pasó desapercibido este miércoles para cientos de granadinos. Sócrates es una vía muy céntrica y muy transitada de la capital. Ahí están centros educativos como Maristas o las Siervas, en cuyo tapial quedó colgada la bici. Dos opciones. La más verosímil es que alguien intentara arrojar el vehículo al interior de esa finca -se supone que con nocturnidad- y no tuvo la suficiente fuerza como para franquear el muro. O directamente la colocó ahí para que todo el mundo fuera consciente de su hazaña. Sea un caso o sea el otro, estamos ante uno o varios incívicos. Fueron muchos los viandantes que, al observar la escena, mostraban su rechazo hacia comportamientos que dañan la imagen de una ciudad que pretender ser cívica y moderna.
Una estampa -otra más- que se suma a la larga lista de actos vandálicos contra las 854 'amarillas' que circulan por Granada y que se pueden utilizar descargándose un par de aplicaciones en el móvil, encender el 'bluetooth' y escanear un código para desbloquear las ruedas y el usuario pueda iniciar la marcha. Tiradas en el cauce del río Genil, destrozadas entre los arbustos, atadas a las copas de un árbol, sin sillín, sin manillar, sustraídas y almacenadas en balcones... un auténtico esperpento.
Invitación al destrozo
Para algunos la instauración de este sistema ha sido una invitación al destrozo y el robo. No es difícil comprobar que hay bicis que aparecen en el mapa pero no están en la calle: los chips de localización señalan a pisos, portales, etc. También hay algunas que aparecen atadas con cadenas para moto, y otras que quedan abandonadas en la calle pero rotas, con signos de que se ha intentado forzar el candado metálico que bloquea la rueda trasera. Bola de Oro y la zona Norte son los lugares en los que más incidencias se registran.
La propiedad de estos nuevos 'inquilinos' del mapa de transporte público es de las empresas, puesto que se trata de una iniciativa privada. Son ellas las que, llegado el caso, pueden denunciar ante la policía el robo o los daños en las bicis.
Publicidad
Las bicicletas son un soplo de aire fresco para una ciudad asfixiada por el tráfico y la contaminación. Pero, vandalismo al margen, surgen voces que advierten de los inconvenientes. Teóricamente, sólo pueden utilizarlas los mayores de edad y deben quedar aparcadas en lugares en los que no molesten. La primera de las condiciones es fácil de burlar: en el registro no se pide acreditación de edad. Respecto a la segunda -pese a que las aplicaciones tienen un mecanismo de penalización para los usuarios que no cumplan-, no es difícil ver aceras repletas de bicis que al estar bloqueadas no se pueden mover.
Las dos empresas que alquilan bicicletas en Granada cuentan con un parque de 854 unidades. Son fácilmente identificables por su color amarillo. Se pueden utilizar instalando una aplicación en el móvil y escaneando un código para desbloquearlas.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Las zarceras tras las que se esconde un polígono industrial del vino en Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.