Los colores de Mariana

José E. Cabrero

Granada

Martes, 24 de mayo 2022 | Actualizado 07/11/2022 11:39h.

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Cova dibuja bajo la atenta mirada de Blacksad. Los folios repartidos por la mesa están llenos de bocetos a lápiz naranja: una mujer con el ceño fruncido y los puños apretados, un soldado de mirada lasciva, una Alhambra en flor, un Lorca inspirado... La luz, que entra por un gran ventanal con vistas a Sierra Nevada, salta de la mesa a las estanterías, repletas de libros y cómics. Un pequeño destello se escapa entre reflejos y cristales hasta cegar por un segundo a Ross, mezcla de labrador y shar pei, que se remueve en el suelo para encontrar una nueva postura. Cova se aparta del papel y observa con detenimiento el resultado. «Va bien, va bien», suspira. Al otro lado de la mesa, el enorme busto de Blacksad asiente.

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Heroína de la libertad

A Covadonga Palacio Pérez (Vigo, 1987) le gusta leer. «Y dibujar, claro». Ella es la autora de 'Mariana, heroína de la libertad', el cómic que narra la vida de Mariana Pineda que publica IDEAL. «La verdad es que no conocía bien la historia de Mariana. Me ha gustado aprender de ella y ver la importancia de su legado. Es todo un referente», dice, repasando las páginas originales dibujadas en papel. «A mí me gusta empezar con materiales clásicos y trabajar a mano. Luego me paso a la tableta, para darle el color y los últimos repasos». El resultado, como verán, es espectacular.

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Cova llegó a Granada en 2001, después de viajar por toda España con su familia. «Mi padre era militar, así que íbamos donde le trasladaban». Hasta que, finalmente, decidieron establecer aquí su hogar. «Hice Bellas Artes y, aunque me encantó la carrera, también me gustaba la parte de ciencia. De hecho, hice varias asignaturas de libre configuración por gusto, como bioquímica o varias de Enfermería». En el último año de la Facultad, Cova entró en la clase de Sergio García, lo que terminó de consolidar una vocación clara por el cómic y la ilustración. «Aprendí muchísimas cosas con él y ese año, en el Salón del Cómic, me presenté a varias editoriales».

Tras pasar unos años como dibujante, ilustradora y colorista para distintas editoriales, tomó la decisión de hacer una pequeña parada en el camino. «Cuando fui madre quise centrarme en ellos, en Nacho y Marcos. Pero ahora que los tengo a los dos en el cole, estoy retomando con muchísimas ganas mi carrera. Y resurjo con Mariana, nada menos», sonríe orgullosa.

«Yo soy de texturas, me gusta emborronar», explica. «Mi estilo es más abierto, más pictórico. Supongo que más cercano al cómic europeo, aunque tengo en mente un par de ideas para Alien y Hellboy». Ahora, cargada de lápices y colores, está enfrascada en nuevos proyectos que pronto verán la luz. Y con alguna sorpresa inesperada: «A raíz de ser madre he descubierto los libros infantiles –dice, cómplice– y es todo un mundo por explorar...».

«En fin –termina, alegre– que quiero hacer muchas cosas y ya no puedo parar».