El ruido en el centro de Garnada se ha convertido en todo un problema. Los vecinos denuncian que los motores de los vehículos de Inagra son «infernales». «El ruido no se puede aguantar, especialmente de madrugada», denuncia uno de ellos. El servicio de recogida de residuos se hace en horario nocturno para no perturbar la actividad de los bares, exponen, y eso provoca que en el silencio de la noche el ruido de las máquinas sean aún mayor. «En calles estrechas, el motor reverbera y parece mi zona -Mesones- un aeropuerto», describe una residente.
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Precisamente en este interactivo analizamos los diferentes tipos de ruidos que puede soportar el oído humano.
Por otro lado, transportes Rober también está en el foco. «Aunque se han comprado algunos autobuses nuevos que hacen menos ruido, aún hay muchos antiguos que, cuando se detienen aquí abajo para coger pasajeros, hacen un estruendo impresionante», critica otro de los vecinos de la zona.
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