Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Sara Bárcena
Domingo, 17 de abril 2022, 11:31
Después de dos años de pandemia, los futuros novios por fin pueden respirar tranquilos. Los contagios por coronavirus se han reducido notablemente y las restricciones han llegado a su fin, por lo que por ahora no habrá amenaza que ponga en peligro su gran día. Parece que, poco a poco, el amor vuelve a inundar la capital granadina.
A las puertas de la temporada alta de bodas, la demanda es tan grande que más de una pareja va a tener que adaptarse a celebrarla casi cualquier día de la semana. Así lo cuenta María Ángeles Porcel, organizadora de bodas en la agencia Alhambra Weddings, que está «hasta arriba de trabajo». Actualmente, tiene un total de 27 eventos a su cargo, entre planificación y ceremonia, y es que el fin de las restricciones ha disparado por completo la organización de bodas en Granada. ¡Vuelve el «sí, quiero»!
Noticia Relacionada
«Empezamos ahora y no paramos hasta octubre. Hay muchas bodas atrasadas de 2020 y 2021 que van a celebrarse en los próximos sábados, pero también hay muchas nuevas solicitudes, así que estamos fijando algunas para 2023 y organizando otras los jueves, viernes y domingos de 2022. Incluso tengo una boda un lunes en el mes de julio porque la pareja quería casarse este año sí o sí», señala Porcel. A pesar de que lo normal es empezar a organizar la boda uno o dos años antes de la fecha, la realidad es que cada vez son más las parejas que, por miedo a una nueva ola de contagios, toman la decisión con muy poca antelación para asegurarse de poder celebrar su día.
Irene Linares
Departamento de Marketing y Comunicación de Los Jardines de Siddhartha
Aunque los lugares favoritos de los clientes de Porcel para la gran cita suelen tener vistas a la Alhambra, también destacan las fincas, los cortijos y los jardines, como Jardines de Siddharta, en Huétor Vega. Según la directora de Marketing y Comunicación del establecimiento, Irene Linares, «el cambio es brutal» con respecto al año anterior, que solo acogieron 33 bodas. Este 2022, sin embargo, el restaurante tiene previsto un total de 103, que se concentran principalmente en los meses de «buen tiempo», de abril a septiembre.
Algunas estaban previstas para 2021 y se cancelaron por el covid, pero la gran mayoría son reservas completamente nuevas, sobre todo de parejas que deciden casarse «a última hora, rápido y corriendo». «La gente está muchísimo más animada, está recuperando la ilusión. Hay muchos novios que van perdiendo el miedo a lo que pueda pasar y vuelven a tener ganas de celebrar su día soñado cuanto antes», señala Linares.
Lo mismo ocurre en el restaurante Camaura de Granada, uno de los más populares para la celebración de este tipo de eventos, que ahora mismo tiene la agenda a rebosar, algo que no se veía desde tiempos pre-pandémicos. Su propietario, Joaquin Dessy Martínez, dice estar «a tope», ya que en el mes de abril el establecimiento albergará una boda por sábado y, a partir de mayo, todas las reservas son de comuniones. El número de reservas se ha incrementado en un 35% con respecto al mismo periodo del año anterior.
«Ya no son solo bodas y comuniones; ahora, hay muchas más fiestas de cumpleaños, jubilaciones, bautizos… Ya no hay restricciones por el coronavirus y la gente va teniendo menos miedo y más ganas de celebrar, y eso se está notando», señala Dessy Martínez, que también ha destacado que cada vez hay más bodas civiles y menos religiosas, «al menos en Camaura». Algunas incluso se ofician en el propio restaurante, aunque la gran mayoría se casa el día anterior, ya que el viernes suele ser un día complicado «por si hay gente que trabaja o es de fuera». Así que lo más habitual es organizar un gran encuentro el sábado para que «todo el mundo pueda asistir».
Ahora que el covid deja paso al amor, las empresas organizadoras de bodas y los restaurantes con salones y espacios habilitados para celebrarlas tienen trabajo como hacía años. Probablemente, el mayor cambio sea que cada vez más parejas contraen matrimonio en el mismo lugar del banquete, lo que explicaría la caída de reservas en templos religiosos y espacios municipales, que no consiguen recuperar la normalidad.
Ayuntamiento de Granada
Departamento de Bodas y Palacios
En la basílica de la Virgen de las Angustias, una de las iglesias más demandadas en la capital granadina para casarse, no ha habido «grandes mejoras». Según el párroco, Blas Gordo, «hay un número más alto de bodas que en los años de pandemia, aunque han disminuido respecto a los años anteriores a la misma. Nada reseñable».
Por otro lado, en los espacios municipales ni siquiera ha habido el más mínimo incremento en las reservas, sino que se han desplomado en comparación con 2021. De hecho, de marzo a septiembre de este año apenas hay 8 bodas previstas, cinco en el Carmen de los Mártires y tres en el Palacio de Quinta Alegre, mientras que en los mismos meses del año pasado se programaron hasta 17, a pesar de las restricciones del momento.
Ya sea por cuestiones sanitarias, de seguridad o de comodidad, es evidente que las nuevas parejas prefieren concentrar toda la fiesta en un único espacio. Y aunque parece que Granada aún va a tener que esperar un poco para recuperar las bodas en todo su esplendor, queda claro que, después de estos años pandémicos, los novios se darán el «sí, quiero» con más ganas que nunca.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
España vuelve a tener un Mundial de fútbol que será el torneo más global de la historia
Isaac Asenjo y Álex Sánchez
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.