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GRAN TÍMIDO Y MAYOR PESIMISTA. El periodista Antonio Gasset pasea por el parque de El Retiro, en Madrid. / JOSE RAMÓN LADRA
Antonio Gasset: «Yo sería un buen secundario a    caballo en un western»
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Antonio Gasset: «Yo sería un buen secundario a caballo en un western»

El director de 'Días de cine', apuntado a la lista de prejubilados de TVE, seguirá en La 2 al menos hasta junio: «Me aterra estar sin hacer nada»

ISABEL IBÁÑEZ

Domingo, 31 de diciembre 2006, 04:15

Si ha tenido usted la suerte de ser un noctámbulo durante la última década, quizás haya gozado de la experiencia que supone rebuscar cada semana, hundido en la madrugada de La 2, el programa 'Días de cine'. Conocerá entonces bien los tics de Antonio Gasset -cuyo apellido le viene del filósofo José Ortega y Gasset, del que es sobrino segundo-, sus quejas por un horario demencial, sus díscolos comentarios contra la publicidad, sus desnudas opiniones sobre las películas y esa forma de ser tan suya, entre pesimista y melancólica, en la que se escuda siempre.

-Bueno, bueno, que tampoco lo digo tantas veces. Debe de ser algo genético porque se han dado varios casos en mi familia. Y soy bastante escéptico, muy descreído. La humanidad no ayuda mucho. Aunque me refugio siempre en el humor.

-Pero si casi nunca sonríe...

-Bueno, no... pero eso es timidez. Vamos, que tengo dientes propios, podría sonreír. Uno de los seres que más admiro en este mundo es Mick Jagger y me encantaría tener su sonrisa permanente.

-Quizás ya era así de niño.

-Era solitario, tímido y mal estudiante. Con dos hermanas, una mayor y otra menor, un padre marino y una madre superprotectora. El único niño de la casa. Tuve todos los elementos para haber sido homosexual, no sé cómo no lo fui. En el cuarto de baño todo eran productos femeninos, pero en vez de travestirme jugaba a los piratas.

Así que si es usted seguidor de Gasset, o simplemente dibuja una sonrisa al verlo aparecer con su pinta de querubín triste, de Quijote del siglo XXI, de 'cowboy' urbano, entonces sabrá que pronto se quedará sin este pequeño placer. El periodista es uno de los trabajadores de RTVE acogidos al plan de regulación de empleo, que contempla la retirada de los mayores de 50 años. Y él, aunque no lo parezca, tiene 60.

-¿Qué hará ahora el espectador insomne sin Gasset?

-De momento estaré. Mis esperanzas llegan a 2009, pero hay que ir paso a paso. En principio tengo firmado hasta junio de 2007 y luego veremos. Yo quiero continuar.

'Hombres libres'

-¿Cómo manejarse sin sus consejos, ahora que la UE ha ampliado el tiempo de publicidad y promociones que se puede emitir entre bloque y bloque de programa?

-A nosotros la publicidad nos hace bastante daño, porque al volver la audiencia siempre baja. Pero me ha posibilitado hacer bromas.

-Ya, pero, ¿qué nos queda ante tal avalancha? ¿Negarnos a escuchar como 'hombres libres' que somos?

-No, negarnos no, aunque esto nos hará más esquizoides de lo que somos. En cualquier caso, la televisión va a sufrir transformaciones muy importantes. No sé bien adónde vamos a ir a parar, es ciencia ficción, un viaje a las estrellas. Y no sé cómo serán esas estrellas, pero es fascinante.

-Pues lo de los 'hombres libres' lo dijo usted, el único comentario por el que le han llamado la atención.

-Sí, y no lo voy a decir ya más. Me llamó mi productor ejecutivo Jesús Ortiz, gran amigo, que me dijo 'Hombre, ten cuidado'. Tampoco fue una amenaza sangrante.

-¿Se lo tuvo que pensar mucho para apuntarse a la lista de prejubilados?

-La verdad es que sí; es más, firmé el último día. Lo consulté con la jefa de personal y el director de TVE. Soy muy infantil en estas cosas, nunca sé lo que se debe hacer, aunque me gustaría seguir trabajando unos años. Pero me podían poner en la calle igual y las condiciones son bastante buenas, así que más que cobarde he sido consecuente. Nunca tuve vocación de héroe, no soy rico y debo pensar en el futuro. No queremos ver la realidad: envejecer es un horror y no hay que darle más vueltas. Ahora, tenemos derecho al trabajo de por vida si estamos capacitados. Por mi forma de ser melancólica y depresiva el estar sin hacer nada me aterra. Mi situación familiar es berlinesa, donde está mi hija, con lo cual estoy en Madrid muy solo y no me veo leyendo el periódico y sin hacer nada; eso sería el comienzo del final más espantoso.

-¿Cómo anda el ambiente por TVE?

-Llegué a hacer un comentario sobre que no soportaba ya más preguntas en el ascensor. La gente, como abstracción, es una pesadilla; que un señor que no conozco de nada me tenga que hablar en una ascensor de qué voy a hacer yo me pone de los nervios.

-En término militares, se van los generales y queda la tropa ¿Funcionará así bien TVE?

-Yo creo que... no, pero soy un gran pesimista. Es una medida que había que tomar, pero se ha hecho un poco tarde y sin un proyecto claro de futuro. Veremos qué dice el nuevo director general. Igual tiene soluciones maravillosas... Pero desconfío de los grandes grupos, me asusta el PP, me asusta el PSOE, me asusta Prisa... Y este hombre, lo digo un poco de broma, viene de Prisa, está aceptado por el PP y es del Real Madrid...

-Se prejubilan ustedes con el 92% del sueldo. Así ya querrían muchos.

-Es un porcentaje muy alto, pero yo hago radio, colaboraciones... Muchas tendré que dejarlas y ese 92% a lo mejor es un 60%. Aunque debo decir que es lo único que no me he atrevido a mirar del miedo que me da, ja, ja...

-Bien, ¿qué hará ahora?

-No lo sé, algo tengo que hacer.

-Dirija una película.

-Soy muy mayor y durante un año se necesita una estabilidad emocional de la que yo carezco. Pero colaboraré en cine, escribiendo... Tengo buenos amigos directores, en productoras privadas...

-Hizo un papelito de montador en 'Arrebato'. Asegura que hubiera sido un pésimo actor, pero seguro que podría bordar alguno.

-Uno secundario a caballo en un western, en una peli estilo 'Grupo salvaje'. El mejor actor para mi gusto, Robert Mitchum, tenía una frase célebre cuando le preguntaban qué métodos empleaba. Él decía que dos: uno a caballo y otro sin él.

Eterno enamoradizo

-También podría dedicarse a su vocación de 'play boy'.

-¿Ah! Ja, ja... Eso lo dije una vez. En mala hora, porque me lo recuerda todo el mundo. Era una respuesta estúpida que en el fondo encerraba una enorme verdad. Por mi cabeza ha pasado la fantasía de tener un éxito tremendo con las mujeres y es un tema que me ha gustado de manera respetuosa. Siempre he sido una enamoradizo. No lo he podido llevar a efecto en su totalidad, por supuesto.

-En una entrevista afirmó que a lo único que aspiraba es a enamorarse. ¿Lo dijo porque es un romántico o se refería más a lo de ir de flor en flor?

-No, no, no. Ésta la tengo que contestar en serio. He ido de flor en flor mucho tiempo, pero lo he dejado y ahora mismo sí me gustaría enamorarme porque es algo que cada vez cuesta más por la edad. Uno se vuelve frío, raro, anquilosado. Pero el amor ha sido un tema que me ha gustado mucho, me ha protegido. El Estado siempre me ha resultado muy abstracto, por eso nunca fui un patriota; el municipio se me escapa; en la comunidad me he buscado la enemistad de los vecinos; en mi planta del trabajo me detestan desde una entradilla que hice contra el tabaco... Siempre me he tenido que refugiar en minorías, y la minoría por excelencia es la pareja.

-En Internet, una mujer afirma que usted es el tipo de persona del que se podría enamorar. ¿Le da la razón?

-Sí, sí, soy fácil. Bueno, no. Soy un poco 'neuras'.

-Coloque por orden de importancia: cine, mujeres y Barça.

-¿Eso es como elegir una de las dos manos!... Mujeres, Barça y cine.

-No le pega ser futbolero.

-Pues sí, desde muy pequeño y tengo amigos en el club que me cuentan cotilleos internos.

-¿Y se emociona con los goles?

-Con los del Barça, sí, y también con los que le meten al Madrid.

-En Internet hay frases suyas...

-Algunas falsas, indignantes, como esa de que 'la mujer sangra cuatro días y no se muere'. No lo he dicho en la vida. No es que sea feminista con mayúsculas, pero soy padre de hija. Y una de Ben Affleck al que comparo... ¿con una cebolleta?

-Con un pepinillo cocido.

-¿Con un pepinillo! ¿Eso no es mío!

-O esto: «Les hablo desde Torrespaña en Madrid, más conocido como el pirulí, que, con su forma fálica, es un símbolo de la modernidad de esta ciudad. Como modernas son también las vidrieras de la catedral de la Almudena y las pinturas del altar de un tal Kiko no sé qué. Por cierto, igual de horribles que algunas películas».

-Ya, ¿pero tú has visto eso? Kiko es un cristiano de esos ultras que toca la guitarra y canta y pinta. No tengo nada en contra de la Iglesia católica, pero decidir que este hombre pinte la catedral de Madrid...

Miedo a la derecha

-'Prokikos' contra 'gassetianos'. Y parecía difícil provocar hoy en día....

-Soy europeísta y a veces me planteo que votaría a la derecha si fuera francés o alemán... Bueno, no creo. Pero jamás sucedería en España. Cada vez que les oigo hablar, ese pánico que tienen a la verdad... Y son capaces de las mayores mentiras. Detesto esa incapacidad de ser oposición. La derecha aquí es tenebrosa, me da miedo. Hay un tipo de español que coge una bandera, y no me refiero a la del aguilucho, y se vuelve agresivo. El otro día iba por mi barrio sin saber que había una manifestación contra el proceso de paz. Pues me tuve que ir a casa porque me empezaron a insultar. Veo un señor con una bandera y me dan ganas de decirle que también es mía. En cuanto veo banderas me quedo en casa.

-También dicen que se refirió a la persona que ayudó a morir al tetrapléjico Ramón Sampedro: «Esa mujer con ansias de fama, exhibiéndose, justificando un frío asesinato» ¿Es verdad?

-No. Hice un comentario porque me molestó la utilización que hicieron de esa muerte, pero no dije frío asesinato porque no lo es. Y estoy a favor de la eutanasia.

-Nos mantuvimos a la espera cuando soltó en Cannes que después de los anuncios se iba a desnudar y tirar al mar. Nos defraudó. ¿Todo por la audiencia?

-Ja, ja, no la recuerdo, pero me pega. Sí, decirlo pero no hacerlo.

-Eche pestes de la tele actual.

-Lo último que he detestado ha sido el acoso a un hijo del 'Pescaílla' donde todos los protagonistas de la historia están muertos. Y odio el polígrafo, creo que es anticonstitucional, atroz y una farsa.

-¿Qué diferencia cuando llegó a 'Informe Semanal'! Vivió acontecimientos como la caída del Muro.

-Y las primeras elecciones libres en Nicaragua con los sandinistas, el primer viaje de Suárez en la democracia, la caída del comunismo en Hungría, el Nobel de García Márquez... Profesionalmente, mi vida ha sido un privilegio y por eso beso este suelo de TVE, a pesar de los problemas.

-Hasta que salió del programa en 1993 por una bronca con María Antonia Iglesias.

-Habían empezado a meter temas basura, crímenes, como aquella cosa atroz de las niñas de Alcácer, que se desmadró. Ella quitó un reportaje del Festival de San Sebastián, lo emitió en La 2 el domingo siguiente sin previo aviso y me dijo: '¿Ves como no ha tenido audiencia?'. Así que anuncié que me iba. Luego firmamos la paz. Y entré en una etapa mala, aquello me había afectado, hasta que Ramón Colom, que no sabía qué hacer conmigo, me hizo director de 'Días de cine'.

Las cenizas de Gasset

-¿A qué le teme Gasset?

-Al dolor de mis hijos, a la enfermedad. Y a la muerte.

-Lleva una cruz, ¿es creyente?

-Me la regaló la madre de mi hija. Soy un agnóstico raro; tampoco ateo, es demasiado contundente.

-¿Dónde esparcirán sus cenizas?

-En un lago de Berlín, Krumme Lanke, el que está más cerca de casa, para no hacer una putada a la familia y que digan eso de 'ahora, el coñazo de las cenizas de papá', sobre todo con la poca herencia que voy a dejar. Y lo del Camp Nou supongo que es imposible.

-¿El Camp Nou? ¿También allí?

-Mitad y mitad, pero es simbólico. ¿Te imaginas que cada culé quisiera hacer algo así? Sería una especie de tanatorio... Sí, me gustaría.

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