La vecina de Alfacar que insultó a la exalcaldesa 'paga' por su libertad

Con sensación de derrota, pero la sonrisa en la cara, Aurora González bajó a la capital a pagar la multa de 60 euros a la que fue condenada por alteración del orden público durante un pleno del Ayuntamiento de Alfacar. Con esto, evita tener que pasar cinco días de arresto domiciliario, después de haber cumplido dos la semana pasada, pena que le impuso el Juzgado de Instrucción número dos de Granada por llamar «idiota» y «fascista» a la exalcaldesa alfacareña María José Pino.

«Si por mí fuera, no habría pagado», explica Aurora, pero «me sentía obligada» después de que vecinos y simpatizantes hayan recogido el dinero para la sanción. «Estoy muy agradecida por todo el apoyo que me han dado», confiesa. Durante el encierro de dos días en su casa de Alfacar, también recibió el soporte de amigos y miembros de Izquierda Unida, que se concentraron en su puerta para denunciar la «represión» del equipo de gobierno municipal.

La suma de la multa salió de una hucha que pusieron IU y el Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) en el mercadillo de los sábados de Alfacar. Aurora podría haber reunido el dinero, aunque no le sobra, porque solo trabaja días sueltos como limpiadora y jornalera en el campo. No obstante, no estaba dispuesta a pagar, ya que considera que el fallo judicial es «injusto» y «una tontería». Por ello, pensaba cumplir los cinco días de arresto domiciliario que contempla la sentencia como pena en sustitución de los 10 días de multa, de seis euros cada uno. Sus compañeros del sindicato, del partido y de la plataforma Stop Desahucios la convencieron, con palabras y dinero, de que es «más necesaria en la calle, luchando por los derechos de la gente, que encerrada en casa durante una semana entera».

La condena

Aurora González fue condenada por el Juzgado de Instrucción número dos de Granada por los hechos acontecidos en una sesión del pleno del Ayuntamiento de Alfacar en septiembre del año pasado. El fallo judicial consideró probado que interrumpió el transcurso normal del acto, lo que considera una alteración del orden público. Aurora asistía como público y llamó «idiota» y «fascista» a la entonces alcaldesa, que la conminó a abandonar la sala, cosa que ella hizo. Por aquellos actos el Ayuntamiento también denunció a un concejal de IU, José Manuel Rubio, pero su juicio se archivó por falta de pruebas y Rubio no fue condenado.

Después de pagar la multa, Aurora vuelve a insistir: «Se ha producido una injusticia porque a mí me condenaron y al concejal de IU, por hacer lo mismo, no». Achaca su condena a «la persecución que sufre el SAT en toda Andalucía», ya que ella también participa en algunas de sus actividades. No obstante, también cree que su abogado «no hizo todo lo que podía haber hecho». Según su propio testimonio, durante un acalorado debate entre la entonces alcaldesa y Rubio, este le profirió los citados insultos, que ella repitió en voz alta, cosa que provocó que la expulsaran de la sala y la identificaran dos policías en los pasillos.

Tras la desestimación de la apelación presentada por el abogado de Aurora, la jueza ratificó la condena de dos días de arresto domiciliario, que se cumplieron la semana pasada, entre el miércoles y el jueves, como ya adelantó Ideal, más la multa de 60 euros. Con el pago de la sanción queda cerrado el caso. «Me alegro dice ya estaba un poco cansada de tanta historia por una tontería».