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Un operario prepara el suministro de gasóleo C a una comunidad de vecinos de Granada.
La bajada del petróleo alivia el precio de los combustibles para calefacción

La bajada del petróleo alivia el precio de los combustibles para calefacción

El coste de la electricidad para consumo doméstico, por el contrario, se ha incrementado en un 8% en relación a enero

Miguel Allende

Lunes, 9 de noviembre 2015, 01:32

El tiempo primaveral de que goza la provincia de Granada en los últimos días, no ha sido óbice para que la demanda de combustible de calefacción se haya disparado ante la evidencia de que el invierno no tardará ya en llegar y lo hará a las bravas, de un día para otro. Las empresas suministradoras de los productos derivados del petróleo -gases licuados y gasóleo C, básicamente- han notado ya un incremento de las peticiones por parte de sus clientes que oscilan entre un 15 y un 20% en relación a tan solo unas semanas atrás. Las benignas temperaturas de que ha disfrutado también esta parte de Andalucía a lo largo de octubre, han retrasado un par de semanas el abastecimiento energético, que suele comenzar a mediados de ese mes e incluso algo antes.

La sorpresa que se han llevado muchos de los particulares y comunidades de vecinos que encargaron estos días el abastecimiento de sus domicilios de gasóleo C es el menor coste de cada litro de este carburante en relación a las mismas fechas del pasado año. Como les ha ocurrido ya a quienes se abastecen de butano, de propano o de gas canalizado, que igualmente han visto caer el precio de venta al público.

La razón no es otra que la bajada de la cotización internacional del barril de petróleo Brent, el de referencia en los países europeos. El día en que se elaboró esta información, el pasado viernes, el coste del crudo para entrega en diciembre seguía a la baja en el Mercado Intercontinental de Futuros (ICE) de Londres, al cotizar a 47,42 dólares por barril, una caída que suponía 0,59 dólares frente a su cotización del día anterior. Lejos quedan los años en los que se llegó a alcanzar los 120 dólares y la factura de los derivados alcanzaba máximos históricos.

En función del consumo de cada particular o comunidad de vecinos, la repercusión en la factura final será mayor o menor, no solo por la caída del coste por litro sino porque a mayor volumen consumido menor coste aún de cada litro encargado.

Gasóleo y gas

Por lo que al gasóleo C se refiere, el que alimenta las calderas de decenas de miles de viviendas en toda la provincia, el precio mínimo con el que se suministra se encuentra en una franja que oscila entre los 0,62 y los 0,64 euros por litro para cantidades pequeñas. Si se solicitan volúmenes elevados, como los que suelen encargar las comunidades de vecinos, el precio disminuye al menos dos o tres céntimos.

Si comparamos estos precios con los de hace un año, que se encontraban en 0,70 euros el litro, el descenso puede oscilar también entre un 11,4 y un 8,5%, en función del valor que apliquemos.

«Este combustible ha ido 'goteando' a la baja durante todo el año y la rebaja aunque solo sea de algún céntimo la notará más quien más cantidad gaste, como es normal», explica el responsable de una conocida firma suministradora de este combustible de Huétor Vega.

Imparable ascenso en el consumo de leña para chimeneas

  • Un combustible sobre el que cada año aumenta la demanda es el de la leña con la que alimentar chimeneas y estufas, especialmente en viviendas unifamiliares y cortijos. Las mejores variedades de olivo se encuentran en el mercado a una media de 0,14 euros el kilogramo, mientras que las de encina tienen un precio de 0,18. Ambos tipos de leña son los de mayor demanda en Granada, en especial el primero, que procede en su gran mayoría de las podas anuales de los extensos olivares con que cuenta la provincia así como de otras limítrofes. Su coste apenas ha variado en los últimos años y la ganancia de las empresas que se dedican a este producto deriva del mayor volumen de venta.

Por lo que respecta al gas natural, la bajada en lo que va de año también ha sido significativa y también supondrá un ahorro para quienes utilicen este combustible. La tarifa regulada de este derivado del petróleo (Tarifa de Último Recurso) ha bajado el 9,3% durante 2015, por lo que los usuarios notarán durante este último trimestre del año una rebaja de su recibo respecto de lo que pagaban en el mismo periodo de 2014. La factura del gas natural tiene dos grandes bloques: el coste de la materia prima y los peajes, que, fundamentalmente, sirven para pagar las infraestructuras gasistas: el transporte, la distribución, las plantas de regasificación y otras. Los peajes, que los fija el Gobierno, tienen un peso en el recibo doméstico cercano al 60%. El coste de la materia prima se calcula a través de una subasta y teniendo en cuenta la evolución de los índices internacionales del gas natural. La materia prima representa algo menos del 40% del recibo.

«La bajada de la factura del 9,3% durante 2015 es consecuencia de fuerte caída del coste de la materia prima, en gran medida, por el descenso del precio del petróleo en los mercados internacionales. El otro gran bloque de la factura, los peajes, se han mantenido prácticamente sin cambios durante 2015», apuntan fuentes de Gas Natural Fenosa, una de las empresas del sector.

Y otro tipo de gas con gran demanda también en Granada, en especial en las viviendas de más antigüedad, como es el butano, también presenta una línea descendente. La popular bombona de 12,5 kilogramos se suministra a 12,76 euros. Si comparamos este coste con el que tenía al inicio del presente año, que era de 17,5 euros, la evidencia es palpable y el descenso del 27%. La más notable de todos los carburantes. Y lo que es aún más positivo: nada apunta a que pueda subir en los próximos meses dada la evolución negativa del coste del petróleo.

Electricidad

El precio de la energía eléctrica es la otra cara de la misma moneda. Quienes utilizan distintos sistemas eléctricos para calentar su hogar, notarán y mucho el encarecimiento de este tipo de calefacción. Al margen de las distintas versiones sobre la evolución del precio de esta energía en lo que llevamos de año, lo cierto es que los recibos se han encarecido al menos en el ámbito doméstico. Un reciente estudio de Facua Consumidores en Acción, el precio medio de un recibo de suministro eléctrico ha pasado de los 71,27 euros a 76,97, incluidos los impuestos que soporta. El incremento ha sido, por tanto, del 7,4%.

Si tomamos en consideración el coste del kilovatio-hora, la subida alcanzaba un 8% a finales del pasado mes de septiembre y en relación también con el primer mes del año, al haber variado de los 14,41 céntimos a 15,67. La electricidad, por tanto, se mantiene como el sistema más caro de calefacción.

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