Los bares de un pueblo de Granada cierran antes para frenar los contagios: «Está en juego nuestro sustento»

La cuarta ola de contagios del coronavirus deja cada día más contagios en Granada. Una situación que ha provocado que los municipios de la provincia con tasas para ser confinados se hayan duplicado tras el fin de semana y sean un total de 31. Uno de ellos es Íllora, que con 97 positivos activos y una tasa de 963,7 casos cada 100.000 habitantes está cada vez más cerca de la 'tasa 1.000', que obligaría al aislamiento perimetral y cierre de la actividad no esencial.

Para intentar poner freno al aumento de contagios, los bares del municipio han decidido cerrar antes, a las 20:00 horas en vez de a las 22:30 horas. Ya que si los datos continúan en la misma tendencia, tendrían que pasar una semana completamente cerrados, lo que supondría el cuarto cierre de la hostelería en Íllora en los últimos meses. «Llevamos así desde el jueves pasado, que es cuando empezó a subir la tasa de contagios», dice Cristian López, un hostelero del pueblo, que reconoce a IDEAL que la situación es «bastante difícil». «Queremos evitar que esto se desmadre, preferimos perder dos horas que no tener que pasar una semana entera cerrados».

La intención de esta medida, a la que se han sumado todos los bares y restaurantes del municipio, no es otra que conseguir frenar la crecida de contagios, algo para lo que parece que llegan tarde pese a sus buenas intenciones. «Estamos con la soga al cuello, son muchos los negocios que han tenido que cerrar de forma definitiva y nuestro miedo es, además del virus, el no poder trabajar. Si no podemos abrir nos vamos a la ruina», lamenta Cristian.

«La preocupación es máxima porque nos encaminamos a otro cierre de los negocios no esencial y el aumento de casos es exponencial», cuenta a IDEAL Antonio José Salazar, alcalde de Íllora. El municipio se encontraba hace una semana con una tasa de contagios superior a los 500, lo que propició que se decretara el cierre perimetral. Sin embargo, la medida no ha impedido que los positivos continúen creciendo. «Seguramente superaremos los 1.000 porque se ha realizado un cribado masivo en el pueblo y han aparecido nuevos casos».

Sobre las causas de los contagios, Salazar dice que la mayoría han surgido en el ámbito familiar aunque reconoce que el hecho de que los municipios cercanos tuvieran muchos positivos también ha podido afectar. Como medida para frenar los contagios, el mandatario ya valora cerrar los parques del pueblo y volver a desinfectar los puntos claves del mismo. Todo ello mientras dan prácticamente por hecho que llegarán al jueves, día en que se reúne el Comité de Alertas, por encima de la 'tasa 1.000'. «Se nos está acabando la paciencia con este virus y quiero mandar ánimo a todos los vecinos. Entre todos, con responsabilidad y saliendo lo mínimo posible, estoy seguro de que podremos superar esta situación», asegura el alcalde de Íllora.