Una murciana gana seis millones en un restaurante de Granada con el Cuponazo y volverá a celebrarlo

El vendedor que ha repartido tanta alegría entre los afortunados es Gregorio González, que tiene su punto de venta en el interior del restaurante Venta Quemada, según se entra a mano derecha, frente a la tienda de embutidos y recuerdos. Gregorio González vendió la serie agraciada con seis millones de euros y otros 125 cupones premiados con 40.000 euros cada uno, que suman otros cinco millones de euros. En total, once millones de euros en premios.

El restaurante es lugar de parada obligatoria para los viajeros procedentes de Murcia, Alicante y Valencia. Muchos de ellos acuden a esquiar a Sierra Nevada. Se sabe que la persona ganadora del cupón de seis millones de euros es una mujer de Murcia, clienta habitual que suele parar en este restaurante y que llamó para dar las gracias y adelantar que pensaba viajar con su familia para celebrar su suerte con una comida en el restaurante Venta Quemada de Cúllar.

Pero no todo el dinero se ha ido fuera, varios trabajadores del propio restaurante tienen uno o varios cupones premiados. El propio vendedor jugó un cupón a medias con María, la mujer que habitualmente trabaja en la tienda junto a la que Gregorio vende sus cupones a los viajeros. Entre los afortunados está también Santiago, que es el encargado de los jardines.

Se da la circunstancia que todos los viernes Gregorio González regala un cupón a la familia propietaria del restaurante, y muchos compran también otro cupón del mismo número. Igual ocurre con parte de los cuarenta empleados. La alegría entre los trabajadores era más que evidente y se les notaba, pese al ritmo de trabajo para atender a la numerosa clientela del lugar, sobre todo en un fin de semana con puentes festivos en Murcia y Valencia. El propio Gregorio se desplazó desde Bacor como todos los días para estar un rato en el restaurante saludar y brindar por su suerte y la de sus clientes. No es el primer premio que da, pero ha sido el más gordo.

El propio restaurante, hace pocos años, estuvo a punto de dar el premio Gordo de la Lotería de Navidad comenta Antonio Cañadas, al frente del restaurante. Antonio estuvo a partir de las 10 de la noche del pasado viernes más de cuatro horas atendiendo las llamadas de muchas personas que preguntaban si era verdad que había tocado el 91.193 «Fue una locura, parecía que era yo quien había vendido el número. No he podido dormir de los nervios».

Tras estos nervios, Antonio reflexiona y asegura que el mejor premio es la buena clientela que tienen en el restaurante. «Nos conocen desde hace cuarenta años. Seguimos trabajando como una venta, con la brasa 24 horas funcionando, con un buen servicio y honradez».

Por su parte Gregorio González, que es vendedor de la ONCE desde el año 2011, asegura que el número 91.193 es muy bonito. «Me gustó el primer día y desde entonces lo vendo todos los viernes», comparte. Para el vendedor de la ONCE, «es un número feo, y a la vez bonito». «¡Fíjate si soy fiel que ya tengo sacada la serie completa para la semana que viene!», comentaba , «con un pellizco de emoción».

Desde 2011, año en el que Gregorio González comenzó a vender en la ONCE, todos los viernes vende el mismo número, la serie completa que integran 135 cupones y que saca uno a uno a través del TPV. «Tanto es así que los clientes le piden el 'número de Venta Quemada'», señala la organización en un comunicado oficial.