La reivindicación del barrio granadino de Campo Verde sobre un solar abandonado cumple un cuarto de siglo

Por tanto, Campo Verde lleva más de un cuarto de siglo con su reivindicación. Las últimas noticias que dieron un atisbo de esperanza a los vecinos y vecinas de Campo Verde ocurrieron hace casi cuatro años. Fue en enero de 2019, cuando Paco Cuenca visitó el lugar en calidad de alcalde de Granada.

Entonces, trasladó su apoyo a los vecinos y anunció que había solicitado al Gobierno central esta parcela abandonada de 3.000 metros cuadrados, un foco problemático para los residentes que acumula deshechos y se usa de aparcamiento, para convertirlo en un centro cívico y cultural para el barrio.

Concretamente, informó que habían iniciado la demanda de cesión de la parcela en cuestión, marcada por el Plan General de Ordenación Urbana como P24, es decir de equipamiento. Cuenca pretendía entonces que el Estado cediera a Granada el «solar abandonado sin ningún tipo de uso que se ha convertido en aparcamiento», por lo que tenía previsto iniciar un proyecto para «el desarrollo de un centro social, cultural o de atención a mayores».

Nada se sabe cuatro años después de esta iniciativa, según el presidente de la asociación de vecinos de Campo Verde, José Manuel Augustín Iglesias. Tampoco tienen el apoyo del Partido Popular o de Ciudadanos. «Tan solo Paco Puentedura, de IU-Podemos, ha presentado alguna moción al Pleno municipal».

Ante esta situación de abandono por parte de los grupos políticos, la asociación de vecinos de Campo Verde ha decidido pasar a la acción. Para empezar, se manifiestan en el propio solar cada primer jueves de mes a las cuatro de la tarde. «Y ya vamos cuatro protestas consecutivas».

Pero no piensan quedarse en las quejas. «Tenemos pensado realizar todas las acciones que sean necesarias hasta que veamos llegar a las primeras excavadoras». Por ejemplo, comparten, «realizar una acampada en el solar», que actualmente sirve de aparcamiento y está lleno de cacas de perros.

Los vecinos y vecinas de Campo Verde se sumaron a la convocatoria, que presenta ahora un lema: «Ni un minuto más / baldío el solar», forzado lo suficiente para que tenga cierta rima, pero ellos encantados. «Tenemos que aprovechar que el próximo mes de mayo son las elecciones municipales y entraremos en campaña electoral, un momento perfecto para alzar la voz y que nos escuchen si quieren nuestros votos», ha razonado el presidente de Campo Verde.

También han justificado sus protestas. «Campo Verde lleva tres décadas sin ninguna inversión en infraestructura alguna de enjundia». Enumeró entonces las inversiones en los barrios vecinos del distrito Norte, para visibilizar la desigualdad. «En Almanjáyar tienen su piscina, en Parque Nueva Granada va un lago artificial, en Casería de Montijo les construyeron un edificio nuevo para la sede vecinal y un campo de fútbol. Aquí no han hecho nada en tres décadas».

Lo que sí tienen claro es lo que reivindican para este solar de tres mil metros cuadrados. Pero resulta que tampoco puede ser cualquier cosa. Al ser propietario del terreno dos empresas del Estado español, tiene que ser obligatoriamente un fin social. Y en Campo Verde, esto les parece estupendo. Por eso piensan en una biblioteca. «Estamos al lado del campus de Cartuja de la Universidad de Granada, y cada vez hay más estudiantes que alquilan pisos».

Otra idea es que sea un centro para mayores, ya que en esta barriada, formada por 5.600 vecinos, más del 70% supera los 65 años. «Pero vamos, que nos conformaríamos de momento con que lo adecentaran, lo convirtieran en zona verde con bancos y sombra y le pusieran una fuente, que de campo verde en Campo Verde ya no queda nada de nada».