Este restaurante japonés de Granada es 'perfecto' en Tripadvisor y Google

Haber atravesado una pandemia supuso un antes y un después para un cocinero que se ha reiventado por completo. José Luis Miranda, un chef de la tierra, encontró durante el confinamiento la inspiración y la fuerza para adentrarse en un proyecto que ha cambiado la forma de degustar comida japonesa en los granadinos. Desde los 18 años se dedica a la cocina, pero el destino le ha deparado a sus 35 años un éxito trabajado desde la base.

José Luis era empleado de los dos restaurantes que se hallaban en el interior del Casino Admiral de Monachil, uno de ellos con un concepto asiático. Fueron solo dos meses los que pudo aprender las técnicas de la gastronomía oriental; suficientes para despertar un interés que pronto se convirtió en amor incondicional.

El encierro en casa le empujó a formarse. «Pedí comida a todos los restaurantes japoneses de la ciudad para ir aprendiendo y comparando», cuenta. Aprendió nuevas técnicas a través de cursos online y un auténtico laboratorio instalado en casa. Cuando el virus lo permitió, se marchó a Málaga a seguir adquiriendo conocimientos bajo el cobijo de un referente a nivel nacional como Carlos Navarro.

Allí encontró el punto clave que le llevó a atraverse a implantar en su ciudad, en Granada, un restaurante distinto. «Me di cuenta de que quería emprender y tener mi propio restaurante», explica José Luis. Y nació KIĀTO. Pocas mesas (cinco) y una «atención personalizada» con el «servicio como motor» y con un «respeto máximo» al producto son la esencia de este restaurante que ha enamorado a los granadinos (5 sobre 5 en Tripadvisor y 4,9 en Google).

Cuando el cliente entra en este vetusto espacio gastronómico de la calle General Narváez, en pleno centro de la ciudad, se encuentra un ambiente sencillo y acogedor para un máximo de doce comensales. Para el que lo conoce, ya sabe que va a disfrutar. Para quien lo visita por primera vez, es recibido con atención directa y sencilla y una propuesta que pasa por dejarse llevar. No en vano, es el primer restaurante 'omakase' de la ciudad. ¿Qué significa? «Lo dejo en ti», o «lo dejo en tus manos». Ni más ni menos que encomendarse a la inspiración del chef José Luis Miranda y su equipo.

Es poco habitual ver en un restaurante japonés un personal local y ningún cocinero con rasgos asiáticos. El equipo de KIĀTO está compuesto por granadinos, «salvo un compañero marroquí, que lleva tantos años aquí que es un granadino más», apunta Miranda. Todos unos apasionados de esta cocina internacional que se han formado para acercarla de otra manera.

Una vez dentro, y aunque existe una carta, la idea es dejarte llevar. «Si te quedas con hambre, siempre hay tiempo de pedir algo más», te explican al llegar, aunque es complicado que eso ocurra. «El poder trabajar el producto, con una elaboración de la técnica desde la base y el especial cuidado de los cortes» hacen el resto, señala el chef. Uno de los grandes secretos está en el arroz. Cuenta el cocinero granadino que utiliza tres tipos de vinagres para su elaboración: uno negro, uno rojo y un tercero balsámico «que nos llega de una bodega de Dílar». Con esta base, el sushi ofrece un sabor distinto y original.

Eso hace que aquel que esté acostumbrado a los sabores de la cocina japonesa «lo valore», y a aquel que no está familiarizado «le sorprenda», cuenta José Luis Miranda.

Tan buena aceptación ha tenido KIĀTO que su CEO y chef principal, junto a su equipo, ha emprendido una nueva aventura en la ciudad en una de las zonas de moda de la Granada, en el espacio gastronómico Boka de la avenida de la ilustración (PTS).

Allí, Sentaki ofrece «el mejor sushi de la ciudad ahora en un formato street food, bajo el sello de calidad de Kiato Sushi», apuntan. En este espacio se puede comer en la barra, comprar la comida y sentarse en una de las mesas del espacio gastronómico o llevársela a casa, al gusto del cliente.

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