Los servicios sociales de Atarfe se hacen cargo de su vecino con diógenes

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El Ayuntamiento señala que asumieron su caso y colaboran con el centro de salud del municipio para garantizar el bienestar del usuario –sin entrar en detalles por respeto a la intimidad del ciudadano–. Del mismo modo, Servicios Sociales mantiene contacto con la familia del afectado. El hombre, que reside en la calle Euskadi, indicó a este medio su voluntad de despejar y limpiar su domicilio.

De acuerdo con su versión, desde hace dos semanas retira restos y chatarra que ha acumulado en estos tres últimos años. El consistorio manifiesta que, en principio, los familiares procurarán el acondicionamiento del hogar. Los vecinos del afectado denunciaron su situación por miedo a que la seguridad del mayor y de ellos mismos se viera comprometida. Los residentes lamentan la insalubridad que afecta a su calle y el deterioro de la convivencia que se ha producido a raíz del trastorno de conducta de un hombre que antes era «amable y comprometido». María Cano, portavoz vecinal, señala que han puesto en conocimiento del Defensor del Pueblo Andaluz el problema que sufren en el barrio. El equipo de Jesús Maeztu ha contestado a los residentes aconsejando que pidan nuevamente su intervención al Ayuntamiento por motivos de salubridad pública y seguridad. Si el Ayuntamiento, pasados los tres meses que legalmente tiene para responder, no lo hiciera, o no adoptara las medidas necesarias para garantizar y mantener la salud pública, la calle Euskadi puede ponerse en contacto nuevamente con el defensor para valorar opciones de intervención. El 1 de julio de 2023 fue la primera vez que los vecinos denunciaron la situación formalmente al Ayuntamiento a través de una instancia escrita. Los residentes volverán a demandar la intervención del consistorio y quedarán a la espera de más novedades.

El síndrome de diógenes y el trastorno por acumulación es un asunto que hay que abordar por distintos frentes para poder atajarlo. El cuidado personal, la higiene, la limpieza a fondo de la basura acumulada, la atención social y psicológica son fundamentales para que los que sufren la dolencia no recaigan.