

Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Los detectives del tiempo
La lluvia golpea con fuerza tras la ventana empañada, como si el cielo estuviera tan perdido como yo en la búsqueda de respuestas. El sol se resiste a salir, igual que la verdad, mientras continúo con los interrogatorios. Me ajusto la gabardina, dejo que las solapas caigan pesadas sobre mis hombros. Saco la libreta, esa compañera de tantas noches en vela. Aquí, en sus páginas arrugadas, se esconde la clave para resolver el misterio de la fecha de una fotografía que ya casi se ha borrado de la memoria de todos, pero no de la de mis testigos.
He reunido a los implicados alrededor de la pantalla de mi ordenador, esa ventana al mundo que me permite ver lo que los bisoños ojos de los compañeros de redacción ya no puede captar. Presuntos implicados que han paseado por las calles que aparecen en esa imagen, ahora un gris recuerdo gris, pero en otra época el terreno fértil de su infancia y juventud. El tiempo ha borrado la fecha en el reverso de la fotografía, pero no ha podido borrar la memoria de los granadinos que la habitaron.
angeluzon_06 no lo duda ni por un segundo: la fecha es 1968. Tan seguro está de ello que incluso me lanza una pista de peso: el edificio de Elvira, en la esquina de la Avenida de Madrid con la Gran Vía, está en obras. Buena pista, angeluzon. El edificio, diseñado por José María García de Paredes —el mismo arquitecto que trazó el Auditorio Manuel de Falla—, se terminó de construir en 1969, en los límites del barrio de San Lázaro. Un moderno edificio en una zona en expansión, símbolo de la nueva manera de vivir que estaba sustituyendo las viejas formas de habitar la ciudad. Pero… me imagino mirándole directamente a los ojos, ¿estás seguro, angeluzon_06? ¿Seguro que está en obras? No lo veo tan claro, le digo exhalándole a la cara el hálito del vapeador.
PadreNoHayMásQueUno_2437 no pierde el tiempo y entra al juego con otra pista clave. Habla del cauce del Beiro, esa cicatriz que divide los terrenos de la vieja prisión del ambulatorio de Cartuja. ¿Crees que eres muy listo, PadreNoHayMásQueUno_2437? Lo apunto en mi libreta y regreso al archivo. Desempolvo un viejo tomo de IDEAL de 1976, y entre sus páginas amarillentas confirmo la coartada. Justo en esa fecha estaban embovedando el cauce del que hasta entonces era un angosto lecho sucio y abandonado.
La fecha sigue escapando entre mis dedos, oscilando entre 1969 y 1976. No tengo un Watson al que insinuarle que lo elemental de mis conjeturas está ahí, flotando en el aire. Pero PadreNoHayMásQueUno se convierte en un cómplice, un colaborador en la sombra que me incita a ampliar la foto. Miro la Avenida de Pulianas, en las cercanías de la tapia del Colegio Ave María San Isidro. Allí se distinguen marcas perfectamente circulares. Las huellas dejadas por los caballos de la policía municipal cuando los sacaban a trotar desde las cuadras del Parque Municipal, junto al antiguo Parque de Bomberos. Sabes demasiado, PadreNoHayMásQueUno_2437. Deberías llamar a tu abogado. Y cuando me da otra pista, acerca de la construcción del Cuartel del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil, en la esquina entre Avenida de Pulianas y Cardenal Parrado, desaparece de la misma forma en que llegó… como un puño al abrir la mano.
Avenida Pulianas
Colegio Ave María San Isidro
Recuerdo las palabras de Hércules Poirot: "El amor es un sentimiento tan complejo y misterioso que incluso los más sabios pueden caer presa de sus encantos." El amor es pasión, y en ese antiguo barrio de Los Cármenes, hay una pasión que no se puede negar. Y es que, como dijo alguien una vez, puedes cambiar de todo: de casa, de familia, de novia, de religión, de dios… pero hay algo que no puede cambiar, que no debe cambiar, y es la pasión. "¿Hay algún futbolero en la sala?", pregunto. Y desde las sombras, como un espectro, aparece GRCF. Sin perder el ritmo, suelta la bomba: "La tribuna alta del estadio, en 1968, ya estaba en pie, y los bloques de la preferencia de la portería del marcador no existían. Comenzaron a levantarse en 1980."
Los Cármenes
En esos mismos años coinciden otros testigos, como ugr_rugby_granada o qiesada.rafi, y desde las redes sociales, cafetería_atenas señala el año 1975, mientras adolfo olmedo rememora la casa de Carmen "la Corsaria", en San Lázaro. Las piezas del rompecabezas se van encajando, una tras otra. JavierAlvarez e isidoval_1728584116, esos dos de pocas palabras, dejan caer los años 1972 y 1973 con la sutileza de un ladrillo al caer al suelo.
La verdad, como un diamante, comienza a brillar con una luz tan intensa que no hay forma de ignorarla. Aspiro el humo del vapeador, y el vaho empaña mi rostro. Mientras tanto, termino de rellenar el último campo de la ficha de catalogación. Fecha de creación: 1973
Los detectives del tiempo
La lluvia golpea con fuerza tras la ventana empañada, como si el cielo estuviera tan perdido como yo en la búsqueda de respuestas. El sol se resiste a salir, igual que la verdad, mientras continúo con los interrogatorios. Me ajusto la gabardina, dejo que las solapas caigan pesadas sobre mis hombros. Saco la libreta, esa compañera de tantas noches en vela. Aquí, en sus páginas arrugadas, se esconde la clave para resolver el misterio de la fecha de una fotografía que ya casi se ha borrado de la memoria de todos, pero no de la de mis testigos.
He reunido a los implicados alrededor de la pantalla de mi ordenador, esa ventana al mundo que me permite ver lo que los bisoños ojos de los compañeros de redacción ya no puede captar. Presuntos implicados que han paseado por las calles que aparecen en esa imagen, ahora un gris recuerdo gris, pero en otra época el terreno fértil de su infancia y juventud. El tiempo ha borrado la fecha en el reverso de la fotografía, pero no ha podido borrar la memoria de los granadinos que la habitaron.
angeluzon_06 no lo duda ni por un segundo: la fecha es 1968. Tan seguro está de ello que incluso me lanza una pista de peso: el edificio de Elvira, en la esquina de la Avenida de Madrid con la Gran Vía, está en obras. Buena pista, angeluzon. El edificio, diseñado por José María García de Paredes —el mismo arquitecto que trazó el Auditorio Manuel de Falla—, se terminó de construir en 1969, en los límites del barrio de San Lázaro. Un moderno edificio en una zona en expansión, símbolo de la nueva manera de vivir que estaba sustituyendo las viejas formas de habitar la ciudad. Pero… me imagino mirándole directamente a los ojos, ¿estás seguro, angeluzon_06? ¿Seguro que está en obras? No lo veo tan claro, le digo exhalándole a la cara el hálito del vapeador.
PadreNoHayMásQueUno_2437 no pierde el tiempo y entra al juego con otra pista clave. Habla del cauce del Beiro, esa cicatriz que divide los terrenos de la vieja prisión del ambulatorio de Cartuja. ¿Crees que eres muy listo, PadreNoHayMásQueUno_2437? Lo apunto en mi libreta y regreso al archivo. Desempolvo un viejo tomo de IDEAL de 1976, y entre sus páginas amarillentas confirmo la coartada. Justo en esa fecha estaban embovedando el cauce del que hasta entonces era un angosto lecho sucio y abandonado.
La fecha sigue escapando entre mis dedos, oscilando entre 1969 y 1976. No tengo un Watson al que insinuarle que lo elemental de mis conjeturas está ahí, flotando en el aire. Pero PadreNoHayMásQueUno se convierte en un cómplice, un colaborador en la sombra que me incita a ampliar la foto. Miro la Avenida de Pulianas, en las cercanías de la tapia del Colegio Ave María San Isidro. Allí se distinguen marcas perfectamente circulares. Las huellas dejadas por los caballos de la policía municipal cuando los sacaban a trotar desde las cuadras del Parque Municipal, junto al antiguo Parque de Bomberos. Sabes demasiado, PadreNoHayMásQueUno_2437. Deberías llamar a tu abogado. Y cuando me da otra pista, acerca de la construcción del Cuartel del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil, en la esquina entre Avenida de Pulianas y Cardenal Parrado, desaparece de la misma forma en que llegó… como un puño al abrir la mano.
Avenida Pulianas
Colegio Ave María San Isidro
Recuerdo las palabras de Hércules Poirot: "El amor es un sentimiento tan complejo y misterioso que incluso los más sabios pueden caer presa de sus encantos." El amor es pasión, y en ese antiguo barrio de Los Cármenes, hay una pasión que no se puede negar. Y es que, como dijo alguien una vez, puedes cambiar de todo: de casa, de familia, de novia, de religión, de dios… pero hay algo que no puede cambiar, que no debe cambiar, y es la pasión. "¿Hay algún futbolero en la sala?", pregunto. Y desde las sombras, como un espectro, aparece GRCF. Sin perder el ritmo, suelta la bomba: "La tribuna alta del estadio, en 1968, ya estaba en pie, y los bloques de la preferencia de la portería del marcador no existían. Comenzaron a levantarse en 1980."
Los Cármenes
En esos mismos años coinciden otros testigos, como ugr_rugby_granada o qiesada.rafi, y desde las redes sociales, cafetería_atenas señala el año 1975, mientras adolfo olmedo rememora la casa de Carmen "la Corsaria", en San Lázaro. Las piezas del rompecabezas se van encajando, una tras otra. JavierAlvarez e isidoval_1728584116, esos dos de pocas palabras, dejan caer los años 1972 y 1973 con la sutileza de un ladrillo al caer al suelo.
La verdad, como un diamante, comienza a brillar con una luz tan intensa que no hay forma de ignorarla. Aspiro el humo del vapeador, y el vaho empaña mi rostro. Mientras tanto, termino de rellenar el último campo de la ficha de catalogación. Fecha de creación:
1973
Los detectives del tiempo
La lluvia golpea con fuerza tras la ventana empañada, como si el cielo estuviera tan perdido como yo en la búsqueda de respuestas. El sol se resiste a salir, igual que la verdad, mientras continúo con los interrogatorios. Me ajusto la gabardina, dejo que las solapas caigan pesadas sobre mis hombros. Saco la libreta, esa compañera de tantas noches en vela. Aquí, en sus páginas arrugadas, se esconde la clave para resolver el misterio de la fecha de una fotografía que ya casi se ha borrado de la memoria de todos, pero no de la de mis testigos.
He reunido a los implicados alrededor de la pantalla de mi ordenador, esa ventana al mundo que me permite ver lo que los bisoños ojos de los compañeros de redacción ya no puede captar. Presuntos implicados que han paseado por las calles que aparecen en esa imagen, ahora un gris recuerdo gris, pero en otra época el terreno fértil de su infancia y juventud. El tiempo ha borrado la fecha en el reverso de la fotografía, pero no ha podido borrar la memoria de los granadinos que la habitaron.
angeluzon_06 no lo duda ni por un segundo: la fecha es 1968. Tan seguro está de ello que incluso me lanza una pista de peso: el edificio de Elvira, en la esquina de la Avenida de Madrid con la Gran Vía, está en obras. Buena pista, angeluzon. El edificio, diseñado por José María García de Paredes —el mismo arquitecto que trazó el Auditorio Manuel de Falla—, se terminó de construir en 1969, en los límites del barrio de San Lázaro. Un moderno edificio en una zona en expansión, símbolo de la nueva manera de vivir que estaba sustituyendo las viejas formas de habitar la ciudad. Pero… me imagino mirándole directamente a los ojos, ¿estás seguro, angeluzon_06? ¿Seguro que está en obras? No lo veo tan claro, le digo exhalándole a la cara el hálito del vapeador.
PadreNoHayMásQueUno_2437 no pierde el tiempo y entra al juego con otra pista clave. Habla del cauce del Beiro, esa cicatriz que divide los terrenos de la vieja prisión del ambulatorio de Cartuja. ¿Crees que eres muy listo, PadreNoHayMásQueUno_2437? Lo apunto en mi libreta y regreso al archivo. Desempolvo un viejo tomo de IDEAL de 1976, y entre sus páginas amarillentas confirmo la coartada. Justo en esa fecha estaban embovedando el cauce del que hasta entonces era un angosto lecho sucio y abandonado.
La fecha sigue escapando entre mis dedos, oscilando entre 1969 y 1976. No tengo un Watson al que insinuarle que lo elemental de mis conjeturas está ahí, flotando en el aire. Pero PadreNoHayMásQueUno se convierte en un cómplice, un colaborador en la sombra que me incita a ampliar la foto. Miro la Avenida de Pulianas, en las cercanías de la tapia del Colegio Ave María San Isidro. Allí se distinguen marcas perfectamente circulares. Las huellas dejadas por los caballos de la policía municipal cuando los sacaban a trotar desde las cuadras del Parque Municipal, junto al antiguo Parque de Bomberos. Sabes demasiado, PadreNoHayMásQueUno_2437. Deberías llamar a tu abogado. Y cuando me da otra pista, acerca de la construcción del Cuartel del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil, en la esquina entre Avenida de Pulianas y Cardenal Parrado, desaparece de la misma forma en que llegó… como un puño al abrir la mano.
Recuerdo las palabras de Hércules Poirot: "El amor es un sentimiento tan complejo y misterioso que incluso los más sabios pueden caer presa de sus encantos." El amor es pasión, y en ese antiguo barrio de Los Cármenes, hay una pasión que no se puede negar. Y es que, como dijo alguien una vez, puedes cambiar de todo: de casa, de familia, de novia, de religión, de dios… pero hay algo que no puede cambiar, que no debe cambiar, y es la pasión. "¿Hay algún futbolero en la sala?", pregunto. Y desde las sombras, como un espectro, aparece GRCF. Sin perder el ritmo, suelta la bomba: "La tribuna alta del estadio, en 1968, ya estaba en pie, y los bloques de la preferencia de la portería del marcador no existían. Comenzaron a levantarse en 1980."
En esos mismos años coinciden otros testigos, como ugr_rugby_granada o qiesada.rafi, y desde las redes sociales, cafetería_atenas señala el año 1975, mientras adolfo olmedo rememora la casa de Carmen "la Corsaria", en San Lázaro. Las piezas del rompecabezas se van encajando, una tras otra. JavierAlvarez e isidoval_1728584116, esos dos de pocas palabras, dejan caer los años 1972 y 1973 con la sutileza de un ladrillo al caer al suelo.
La verdad, como un diamante, comienza a brillar con una luz tan intensa que no hay forma de ignorarla. Aspiro el humo del vapeador, y el vaho empaña mi rostro. Mientras tanto, termino de rellenar el último campo de la ficha de catalogación. Fecha de creación:
1973
Avenida Pulianas
Colegio Ave María San Isidro
Los Cármenes
Los detectives del tiempo
La lluvia golpea con fuerza tras la ventana empañada, como si el cielo estuviera tan perdido como yo en la búsqueda de respuestas. El sol se resiste a salir, igual que la verdad, mientras continúo con los interrogatorios. Me ajusto la gabardina, dejo que las solapas caigan pesadas sobre mis hombros. Saco la libreta, esa compañera de tantas noches en vela. Aquí, en sus páginas arrugadas, se esconde la clave para resolver el misterio de la fecha de una fotografía que ya casi se ha borrado de la memoria de todos, pero no de la de mis testigos.
He reunido a los implicados alrededor de la pantalla de mi ordenador, esa ventana al mundo que me permite ver lo que los bisoños ojos de los compañeros de redacción ya no puede captar. Presuntos implicados que han paseado por las calles que aparecen en esa imagen, ahora un gris recuerdo gris, pero en otra época el terreno fértil de su infancia y juventud. El tiempo ha borrado la fecha en el reverso de la fotografía, pero no ha podido borrar la memoria de los granadinos que la habitaron.
angeluzon_06 no lo duda ni por un segundo: la fecha es 1968. Tan seguro está de ello que incluso me lanza una pista de peso: el edificio de Elvira, en la esquina de la Avenida de Madrid con la Gran Vía, está en obras. Buena pista, angeluzon. El edificio, diseñado por José María García de Paredes —el mismo arquitecto que trazó el Auditorio Manuel de Falla—, se terminó de construir en 1969, en los límites del barrio de San Lázaro. Un moderno edificio en una zona en expansión, símbolo de la nueva manera de vivir que estaba sustituyendo las viejas formas de habitar la ciudad. Pero… me imagino mirándole directamente a los ojos, ¿estás seguro, angeluzon_06? ¿Seguro que está en obras? No lo veo tan claro, le digo exhalándole a la cara el hálito del vapeador.
PadreNoHayMásQueUno_2437 no pierde el tiempo y entra al juego con otra pista clave. Habla del cauce del Beiro, esa cicatriz que divide los terrenos de la vieja prisión del ambulatorio de Cartuja. ¿Crees que eres muy listo, PadreNoHayMásQueUno_2437? Lo apunto en mi libreta y regreso al archivo. Desempolvo un viejo tomo de IDEAL de 1976, y entre sus páginas amarillentas confirmo la coartada. Justo en esa fecha estaban embovedando el cauce del que hasta entonces era un angosto lecho sucio y abandonado.
La fecha sigue escapando entre mis dedos, oscilando entre 1969 y 1976. No tengo un Watson al que insinuarle que lo elemental de mis conjeturas está ahí, flotando en el aire. Pero PadreNoHayMásQueUno se convierte en un cómplice, un colaborador en la sombra que me incita a ampliar la foto. Miro la Avenida de Pulianas, en las cercanías de la tapia del Colegio Ave María San Isidro. Allí se distinguen marcas perfectamente circulares. Las huellas dejadas por los caballos de la policía municipal cuando los sacaban a trotar desde las cuadras del Parque Municipal, junto al antiguo Parque de Bomberos. Sabes demasiado, PadreNoHayMásQueUno_2437. Deberías llamar a tu abogado. Y cuando me da otra pista, acerca de la construcción del Cuartel del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil, en la esquina entre Avenida de Pulianas y Cardenal Parrado, desaparece de la misma forma en que llegó… como un puño al abrir la mano.
Recuerdo las palabras de Hércules Poirot: "El amor es un sentimiento tan complejo y misterioso que incluso los más sabios pueden caer presa de sus encantos." El amor es pasión, y en ese antiguo barrio de Los Cármenes, hay una pasión que no se puede negar. Y es que, como dijo alguien una vez, puedes cambiar de todo: de casa, de familia, de novia, de religión, de dios… pero hay algo que no puede cambiar, que no debe cambiar, y es la pasión. "¿Hay algún futbolero en la sala?", pregunto. Y desde las sombras, como un espectro, aparece GRCF. Sin perder el ritmo, suelta la bomba: "La tribuna alta del estadio, en 1968, ya estaba en pie, y los bloques de la preferencia de la portería del marcador no existían. Comenzaron a levantarse en 1980."
En esos mismos años coinciden otros testigos, como ugr_rugby_granada o qiesada.rafi, y desde las redes sociales, cafetería_atenas señala el año 1975, mientras adolfo olmedo rememora la casa de Carmen "la Corsaria", en San Lázaro. Las piezas del rompecabezas se van encajando, una tras otra. JavierAlvarez e isidoval_1728584116, esos dos de pocas palabras, dejan caer los años 1972 y 1973 con la sutileza de un ladrillo al caer al suelo.
La verdad, como un diamante, comienza a brillar con una luz tan intensa que no hay forma de ignorarla. Aspiro el humo del vapeador, y el vaho empaña mi rostro. Mientras tanto, termino de rellenar el último campo de la ficha de catalogación. Fecha de creación:
1973
Avenida Pulianas
Colegio Ave María San Isidro
Los Cármenes
Créditos
Texto Amanda Martínez Granada
Formato Carlos Valdemoros Granada
Publicidad
Josemi Benítez
M. Victoria Cobo | Granada, Sandra Martínez, Juanjo Cerero | Granada y Javier Morales | Granada
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.