Un guardia civil multa a un policía local en Granada que hablaba por el móvil al volante en un servicio

El policía local había contactado con el servicio de emergencias del 112 por la desaparición de una persona discapacitada por la zona del río Genil y estaba recabando datos para empezar a coordinar un operativo policial. Este policía comenzó a trabajar antes de llegar a las dependencias de la Jefatura de Policía Local de Granada, de ahí que fuera en su coche particular y no en uno oficial, cuando fue interceptado.

El artículo 11 apartado 3 del Código de Seguridad Vial dice textualmente: «Queda prohibido conducir utilizando cascos o auriculares conectados a aparatos receptores o reproductores de sonido, excepto durante la realización de las pruebas de aptitud en circuito abierto para la obtención de permiso de conducción en las condiciones que se determinen reglamentariamente. Se prohíbe la utilización durante la conducción de dispositivos de telefonía móvil y cualquier otro medio o sistema de comunicación, exceptuando el desarrollo de la comunicación tenga lugar sin emplear las manos ni usar cascos, auriculares o instrumentos similares. Quedan exentos de dicha prohibición los agentes de la autoridad en el ejercicio de las funciones que tengan encomendadas».

El último párrafo del citado artículo deja bien claro que un agente de la autoridad -como es el caso del policía local- puede hacer uso del móvil siempre y cuando se trate de un servicio público, sin especificar si tienen o no que ir en el coche oficial o si deben ir con el uniforme, tal y como iba este policía local.

Esta sanción ha generado mucho malestar en los cuerpos policiales que comparten grupos de WhatsApp por la sanción de tráfico dirigida contra este policía local, pese a que el Código de Seguridad Vial respalda al sancionado.

La sanción por usar el móvil mientras se conduce consiste en una multa de doscientos euros y la pérdida de tres puntos del carné de conducir. Aunque este policía local ha decidido recurrir la sanción y para ello arguye cuál era su situación cuando fue multado por este agente de la Guardia Civil de Tráfico.

Lo mejor de toda esta historia es que la persona discapacitada a la que buscaban por el entorno del río Genil apareció finalmente sana y salva.