La tienda de tartas de queso que arrasa en Málaga desembarca en Granada

Un emprendedor malagueño puso en marcha un negocio de tartas de queso hace tres años y ahora cuenta con cinco establecimientos y un obrador en Málaga capital y se prepara para salir de la provincia y desembarcar en Granada. Ricardo Álvarez ha hecho de La Cheesequería una marca consolidada primero especializada en tartas de queso y ahora con una carta que incluye una oferta salada tanto para mediodía como para desayuno o brunch. Sus locales cuentan con llenos diarios y frecuentes colas.

Desde la empresa señalan que la intención es empezar la reforma del local la próxima semana y, aunque no hay fecha fijada de apertura, pues dependerá de los plazos que marque la propia obra, será «seguro antes de Navidad». Y es que entre la oferta que prometen en su catálogo incluye roscos de reyes y panetones, que «en Málaga han arrasado y estamos seguros de que en Granada también lo harán», apuntan desde La Cheesequería.

El local a reformar, de unos 40m2, contará con cinco empleados que servirán los productos para llevar. Los granadinos podrán degustar, dentro de una amplia carta, gran variedad de tartas de queso englobadas en tres especialidades: queseras, basadas en la tarta de queso más tradicional; atrevidas, con ingredientes que le dan un toque especial; y las golosas, para aquellos a los que le guste más el dulce.

Para conocer los gustos de los granadinos, en el escaparate del local en el que se ubicará este nuevo negocio, junto al cartel que anuncia la llegada próxima de La Cheesequería, han dejado una hoja en la que se pueden apuntar aquellos sabores que le gustaría probar en el establecimiento repostero cuando esté en marcha.

La elección de Granada, además de por su potencial y su atractivo para vecinos y turistas, permite a La Cheesequería mantener su filosofía de ofrecer «productos recién horneados». «La cercanía entre ambas ciudades ofrece la posibilidad de que las tartas salgan de nuestro obrador de Málaga y lleguen a Granada perfectas para ser consumidas», explican desde la empresa, que augura un importante trasiego de tartas a diario entre ambas ciudades por la A-92.

La Cheesequería comenzó en año con dos tiendas en Málaga capital y lo cerrará con cinco establecimientos especializados, más una taberna y obrador propio, entre ellos este primer local fuera de tierras malagueñas.

La filosofía del establecimiento es clara: «Queremos hacer de La Cheesequería una gran marca, pero hay que saber crecer y delegar. Nosotros partimos de cero y hemos ido creando funciones y puestos para toda esa gente que ha ido creciendo con la empresa, desde abajo. Es verdad que está siendo un crecimiento muy rápido. Si lo pienso, me parece una locura todo lo que hemos conseguido en tres años, pero estoy tan bien acompañado que casi ni me he dado cuenta», reconocía Ricardo Álvarez en el diario Sur hace unos meses. La previsión es terminar este 2024 con unos 45 empleados.

Ricardo Álvarez completó su formación como cocinero al lado de figuras como Dabiz Muñoz o Mauricio Giovanini. Sin embargo, el covid frenó sus aspiraciones en la alta cocina. En realidad, le llevó por otro camino en el que tiene ahora muchísimos planes por delante. De hacer tartas en el horno de su madre durante la pandemia a regentar un negocio que sigue creciendo y que ahora sale de Málaga para proseguir con esta filosofía expansiva.

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