Edición

Borrar
El cronista observa junto al escultor, una mano de María Santísima de La Concepción. Juan Ortiz
El bocinazo
Crónicas granadinas

El bocinazo

El maestro Aurelio López Azaustre, granadino hasta los tuétanos, amaba su ciudad, su arte, monumentos y cultura sobre todas las cosas

Domingo, 25 de febrero 2024, 00:15

Era el maestro Aurelio López Azaustre, un hombre alto, enjuto, de mirada vivaracha y, sobre todo, de una voz grave, abovedada que le imprimía a su carácter una personalidad acusada y única. Granadino hasta los tuétanos, amaba su ciudad, su arte, monumentos y cultura sobre ... todas las cosas, a lo que unía un profundo conocimiento de nuestras tradiciones populares, sin que esto impidiera una constante puesta al día de lo que ocurría fuera de nuestras provincianas fronteras. Sobre todo, si tenía que ver con el arte y su progresión hacia nuevas formas, a las que nunca fue ajeno, pese a que el mayor volumen de su obra escultórica recalara en el clasicismo o en la imaginería más ortodoxa.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

ideal El bocinazo