El Almería 'pasa' de Guilherme y no quiere saber nada del lateral hasta julio

El Almería encontró el pasado verano un 'aliado' inesperado en la figura del Real Valladolid. Dos clubes que hasta la fecha llevaban posiciones encontradas en algunos casos pasados y denunciados (Barreto) se entendían en la cesión de Guilherme. El díscolo lateral zurdo era mandado por la UD hasta Pucela para ver si, de una vez, lograba centrar la cabeza y aprovechar el jugar en la liga española. No tardó ni dos partidos en 'liarla'. Dos expulsiones prácticamente consecutivas y vuelta a empezar. Eso en el terreno de juego. Fuera, aún peor.

Además de diversos incidentes extradeportivos, con los compañeros también tuvo algún que otro 'desencuentro'. Incluso alguna pelea en varios entrenamientos.

Con estos antecedentes, Abel Resino ha recomendado a la entidad castellana que lo ceda en el mercado de invierno. El Almería, que tiene sus derechos deportivos, poco puede hacer. Los vallisoletanos son los 'responsables' de Guilherme hasta el 30 de junio y saben lo que deben hacer. Se está buscando acomodo en Brasil. Alfonso García, presidente de la UD, lo único que puede confirmar es que los almerienses tienen «las tres plazas de extracomunitarios y no puede entrenar con nosotros». El 1 de julio volverá a ser un 'problema' para la UD, si es que sigue perteneciendo al club rojiblanco.