Martes, 11 de agosto 2020, 00:32
Mass es un joven senegalés de 21 años que el pasado viernes recibió tres puñaladas, en brazo, cara y en una arteria, en la calle Guadix de la Chana. El presunto autor fue detenido por la Policía Nacional, y tras dos noches en los calabozos fue puesto en libertad con cargos por el juzgado de guardia el pasado domingo. Mass, con quien ha podido hablar IDEAL, se muestra «intranquilo» sabiendo que este individuo, su agresor, está en la calle.
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«Me apuñaló sólo por odio y una de las cuchilladas me dio en la arteria. Me cogieron a tiempo y me pudieron operar. No me ha matado de milagro», dijo ayer la víctima a este periódico poco después de ser atendido en un centro sanitario de la capital.
Un día antes del apuñalamiento, el jueves por la noche, la víctima y el agresor se vieron en la puerta de un inmueble donde Mass reside de okupa junto a otras personas. El agresor le intentó disputar el espacio que Mass tenía en ese inmueble, pero sin llegar a ningún tipo de enfrentamiento. Fue al día siguiente, viernes sobre las 12 horas del mediodía cuando este senegalés volvió a encontrarse con su agresor en la calle Guadix de laChana. «Venía con tres más y me sacó una navaja. Me agredió. Yo intenté defenderme, pero me la hincó en el pecho y no pude hacer nada más», apunta.
Policía Nacional detuvo al agresor, quien tiene antecedentes penales, una hora después del apuñalamiento. Se trata de un hombre de 49 años de nacionalidad argentina.
Mass fue operado el mismo viernes y ya está en la calle, tras recibir el alta médica. Ahora le toca recuperarse de las heridas. «No estoy tranquilo porque este hombre no se va a quedar quieto, lo sé. Por la noche me cuesta mucho dormir por eso. Estoy en España para buscarme un futuro y trabajar. No tengo familia aquí, sólo a mi novia», explica durante una conversación mantenida ayer a pocos metros del centro de salud de la Chana.
Mass vino a España como cientos y cientos de personas que arriesgan su vida cruzando el Estrecho en patera para buscar un futuro mejor. Lleva cuatro años en el país y tres de ellos los ha pasado en Vizcaya. «Sé hablar más euskera que español», ironiza, mientras reitera que necesita una oportunidad para poder trabajar. «Sé de jardinería, fontanería, agricultura, puedo hacer cualquier cosa». Atropella las palabras, dejando de lado el apuñalamiento y tratando de aprovechar el momento para hallar una oportunidad que le permita cambiar su situación actual. Busca trabajo para obtener un dinero que le permita vivir en condiciones y alquilar un piso con su pareja.
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El detenido está acusado de un homicidio en grado de tentativa con lesiones graves. De momento, hay una denuncia contra él y un atestado policial donde se relata lo sucedido. El joven Mass asegura que ha vuelto a nacer.
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