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Imagen de Víctor en la boda de su hermano, celebrada el año pasado. IDEAL
Víctor, el jienense fallecido en un accidente de tráfico en Granada que «alegraba vidas»

Víctor, el jienense fallecido en un accidente de tráfico en Granada que «alegraba vidas»

Su barrio, el Polígono del Valle, está de luto desde la madrugada del domingo, cuando perdieron a este queridísimo vecino de 33 años

Laura Velasco

Granada

Martes, 8 de agosto 2023

Jaén está conmocionada desde la madrugada del pasado domingo, cuando perdió a uno de los suyos en un accidente de tráfico en la A-44, a la altura de Iznalloz. Víctor se fue a los 33 años, demasiado joven, con demasiado por vivir. Su marcha ha dejado devastada a la familia, muy numerosa, así como a decenas de amigos que tuvieron la suerte de conocerle. Porque él siempre estaba sonriendo y «alegrando vidas», como destaca su entorno.

El joven, al que le decían cariñosamente 'Victuni' o 'Pimiento', era del Polígono del Valle, barrio jienense que adoraba. Trabajaba en una fábrica de máquinas de gimnasio situada en Pegalajar y se encontraba en un momento muy feliz, ya que tenía esa estabilidad económica que siempre deseó. Su hermana Fátima explica que aquel fatídico día Víctor había estado en la playa, ese lugar que le apasionaba. Volvió a Jaén, dejó a su padre en casa y regresó a Granada de madrugada. «Él fue el último en verlo», cuenta a duras penas.

Su marcha ha sido repentina y traumática. En el velatorio, celebrado este lunes, no cabía un alfiler. Todos recuerdan a ese chico que siempre estaba riendo, guiñando el ojo, parando el coche para bajar y dar un abrazo si se cruzaba con alguien. «Tenía amigos en todos lados y ayudaba siempre que podía. Cuando veía a alguien pidiendo en la calle no dudaba en darles dinero, nos recordaba que nosotros también podríamos vernos en esa situación. Tenía un corazón enorme y desprendía amor», cuenta su hermana entre lágrimas.

También era «guapísimo y presumido»; solía arreglarse el flequillo frente al espejo, usar perfume e ir a la moda con las últimas tendencias en ropa. Aunque su madre estaba empeñada en que «se echara novia», estaba soltero y bromeaba con que «no quería complicarse la vida». Su madre, esa que hoy le llora desconsolada, también solía aconsejarle que ahorrase. Él respondía: «¿para qué quiero el dinero, si está para gastarlo y uno nunca sabe cuando va a morir?». «Él quería disfrutar y aprovechar el tiempo», agrega Fátima.

Valentía en su peor momento

La vida de Víctor no fue siempre color de rosa. Pasó por momentos «muy difíciles», perdido en una época por la droga y el alcohol. Su valentía al pedir ayuda y su tesón le permitieron salir de aquel bucle y convertirse en una nueva versión mejorada. «Ya no fumaba ni bebía y le gustaba ir al gimnasio, estaba en su mejor momento. Se propuso hacerlo por mi madre y lo consiguió», cuenta orgullosa su querida hermana, uno de sus pilares fundamentales. «Yo iba a estar con él pasara lo que pasara y siempre le di consejos», añade.

Otro de sus motores eran sus sobrinos, de seis años y 20 meses, a los que adoraba. Les llevaba a la piscina -estar en remojo era su pasión- y pasaba horas jugando con ellos. «Estaba loco por los niños, le quedó pendiente llevarlos a la Warner, como les prometió. Les vamos a hablar siempre de su tío para que sepan la gran persona que estuvo a su lado», manifiesta.

La familia pedirá ayuda psicológica para seguir adelante. Mientras, se quedan con todo lo que han compartido con él. En redes sociales el apoyo recibido es abrumador, las palabras bonitas dirigidas a Víctor no cesan. «Nos consuela saber que lo quería tantísima gente y que ya está descansando con sus abuelos, a los que adoraba», apostilla Fátima, que agradece a Jaén el apoyo recibido. Ahora les toca estar unidos por él, su 'Victuni', ese joven que «desprendía amor».

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