Aaron se reivindica pese a la 'manita' del guion de Tarantino

Lo que son las cosas, Aaron llevaba un balance de 12 paradas y dos goles encajados; anoche, en los cuartos jugados contra el Barcelona de Messi, con un guion propio de Tarantino, de emociones fuertes, al límite del corazón, fue batido en cinco ocasiones pero logró 14 paradas de éxito, más que en los cuatro compromisos anteriores del torneo del K.O.

Aaron se reivindicó el día en que se confirmó la marcha de Rui Silva, su obstáculo a la titularidad. Ahora que el destino del portugués es el Betis, se probó y demostró que tiene sitio. Del técnico dependerá. El vigués depositó la confianza anoche en él y a nadie defraudó. Mantuvo el tipo ante un Barça arrollador, que botó 18 saques de esquina –14 al descanso– y tan solo en el primer tiempo ya disparó once veces. Hubo tres balas a la madera. Su intensa noche, de exigente trabajo, empezó con tiros de Araujo, Messi y Trincao, doble acción de nivel, falta al argentino, despejes al estilo balonmano en contras o cesión de Duarte y parada en dos tiempos a Sergi Roberto.

Tras el intermedio, de nuevo con el pie, a Messi con rosca, manotazo en chilena de Griezmann, dos más a Leo por raso y otras cuatro en el tiempo extra, incluidos los lanzamientos del pibe, como el del 3-4, donde al rechace De Jong le fusila. Aaron se lució pese a la 'manita' y es que, con Tarantino, muere desangrado hasta el protagonista...