Un mes apasionante con la mente limpia

Los castellonenses no son precisamente unos teloneros. Siguen adelante en la UEL y han encadenado cuatro triunfos consecutivos entre uno y otro torneo. Vuelven a pelear por la zona de privilegio con sus 43 puntos, por los 36 que manejan los rojiblancos, al acecho. No es una exigencia, pero sí los de Diego Martínez quieren volver a pelear por las plazas que dan acceso a las competiciones continentales, la ocasión se presenta ideal para recortar diferencias con el conjunto al que siguen la estela. Es una manera de calcar el camino del último ejercicio, cuando a la chita callando dio un zarpazo en la última jornada. Para el entrenador, en cualquier caso, la prioridad es alcanzar la suma que garantice una campaña más la presencia del Granada en Primera división, algo que parece cantado, pero que debería de celebrarse. Consolidarse en la élite es el objetivo natural del club. Lo demás, algo de lo que disfrutar mientras se dé.

El curso está dejando muchas secuelas en forma de lesiones, pero el parón ha servido para que la plantilla desconectara un poco de la rutina y se limpiara la mente. La semana ha sido tranquila y solo queda por comprobar cómo evolucionan los futbolistas que poco a poco están dejando la enfermería y en qué estado se encuentran los cuatro internacionales que han estado con sus selecciones. En principio, Rui Silva, Domingos Duarte, Eteki y Nehuén vuelven a punto. Queda por ver si Machís está perfectamente para jugar o si se reserva para la cita del próximo jueves. Con los demás, misterio. En el Villarreal, no vendrá un exrojiblanco, Estupiñán, que sufrió una lesión muscular con su selección.

El Granada ha manejado dos versiones diferentes cuando ha afrontado eliminatorias entre semana. Un 'once' más o menos de gala en Europa, dentro de la disponibilidad, y variaciones en el campeonato nacional, con algunos de los que solo están inscritos en Liga. Pero al venir de descanso, tal vez Diego Martínez sí sopese alinear un equipo con algunos de sus intocables ante el que fue su maestro, Unai Emery. Tendrá que estudiar si le da cancha a gente como Quina y Fede Vico, o bien encara el pulso con el Villarreal de otra manera. Vuelve la 'ingeniería' de esfuerzos.

Lo que está claro es que en estas semanas se descubrirá si el Granada puede asaltar retos mayores. Mejorar lo que parece inmejorable.