Un gaditano para ganar en la 'tacita de plata'

Stoichkov querrá imponerse en ese duelo de esgrimistas. De momento, no le ha dado el impulso esperado al Granada, entre su puesta a tono y las dos jornadas de penitencia por sus quejas airadas ante el conjunto maño. Metió un gol de bella factura en el triunfo ante el Eldense, pero en lo demás dejó algún fallo en los mano a mano con los porteros y meros detalles de su calidad. Para hacer olvidar a Myrto Uzuni, a pesar de ser tan distintos, tendrá que triunfar en plazas como la de este domingo, en la que la escuadra también demanda un mejor manejo del balón.

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Si de algo adolecieron los rojiblancos en las últimas citas, en la debacle en Córdoba y el triunfo gélido con el Racing de Ferrol, fue de falta de un verdadero enganche entre su centro del campo y la vanguardia, pues ni la doble punta formada por Boyé y Borja Bastón lo logró en la provincia vecina ni tampoco un Reinier apático en Los Cármenes. Stoichkov ha de ser la argamasa de una estructura con tendencia a partirse por las subidas de sus extremos, Tisaishvili y Rebbach, lo que a veces deja sin auxilio a Martin Hongla y Sergio Ruiz. Si Fran Escribá logra ponerle remedio, dando pausa al juego, puede que sus posibilidades de éxito aumenten.

La otra clave, una vez más, estará en quien marque primero. Para contener, el Granada cuenta bajo palos con Diego Mariño, que viene de un regreso con puerta a cero, y el mismo cuarteto por delante que con los ferrolanos, constituido por Rubén Sánchez, Miguel Rubio, Manu Lama y Carlos Neva. Los centrales estuvieron entre algodones durante la semana, pero Escribá aseguró que se enchufarán. Rubio mostró un aparatoso vendaje en los primeros compases del último entrenamiento, que luego se quitó para trabajar a gusto.

Garitano se encontró un equipo a la deriva con su predecesor, el exrojiblanco Paco López, y le ha dado otra impronta con la seguridad por bandera. De doce partidos con el vasco, el Cádiz ganó seis, empató cinco y solo perdió uno, hace dos jornadas en Albacete, por 3-0. Viene de imponerse en La Rosaleda al Málaga por 0-2 y a la chita callando ya está a una distancia todavía salvable de sector de excelencia. Todo pasa por complicar a un Granada que querrá enjugar la imagen ofrecida en el último derbi andaluz.

Viene una racha determinante para los pupilos de Escribá. Tras Cádiz, reciben al Oviedo, sexto clasificado. Después, viaje a Tenerife para medirse a un equipo imprevisible pese a su camino hacia el descenso. Después, en Los Cármenes con el Almería para iniciar abril. De cómo esté clasificatoriamente ese día se intuirá el final de temporada. Primera parada, la 'tacita de plata'.