El Granada asume que no recuperará a los cedidos de esta temporada

Este martes se conoció la convocatoria de Jesús Vallejo con la selección española que irá a los Juegos Olímpicos de Tokio. Un premio que le llega tras campaña y media en préstamo luciendo la camiseta nazarí. Con contrato con el Real Madrid hasta 2025, está a la espera de que los blancos concreten qué pasará con él. El maño, de 24 años, quiere quedarse en el conjunto blanco o bien salir traspasado, sin más cesiones. Eso bloquea las opciones de regreso a Granada, donde se integró a la perfección y se sintió muy cómodo. Por ahora, su agente no ha recibido llamadas del director deportivo, Pep Boada, ni de su equipo de trabajo para sondear esta alternativa. La economía rojiblanca impide cualquier planteamiento que conllevara la compra de sus derechos deportivos. En tal tesitura, cualquier escenario de vuelta asoma quimérico.

También es casi imposible el retorno de Robert Kenedy. El extremo brasileño, de 25 años, pertenece al Chelsea, con quien amplió su vinculación hasta 2024. Aunque en principio parece llamado a arrancar la pretemporada con los 'blues', es poco probable que se abra hueco en la plantilla de Tuchel. Por ello, ya ha sido sondeado por varios equipos que le desean. En su país natal, aparece el Flamengo, que va muy fuerte a por su fichaje. El Chelsea, como ocurre con Vallejo, estudia la opción de venderlo al mejor postor, aunque valoraría otro préstamo. En esa guerra tiene complicado entrar el Granada ya. Hace meses, Kenedy confesó a íntimos que estaba feliz como rojiblanco. Con Diego Martínez como preparador, había ofrecido su mejor versión como futbolista. Las circunstancias han cambiado y las posibilidades presupuestarias del Granada están limitadas.El club sufragaba su importante salario. Su rendimiento estuvo a la altura, pero repetir estancia queda alejado.

Menos debate abren Nehuén Pérez y Domingos Quina, dos jóvenes que no terminaron de cuajar en su periplo. Nehuén, de 21 años, irá a los Juegos Olímpicos como Vallejo en representación de la selección argentina. Su pase es del Atlético de Madrid, atado hasta 2024, pero sus prestaciones no han sido las mejores en el Granada, con muchos altibajos, en parte por la falta de experiencia. Se pasó casi toda la temporada siendo el cuarto central de la plantilla. Encontró algo de vuelo cuando el equipo formó con línea de tres zagueros atrás, pero en algunas citas fue sacrificado al descanso por ciertos detalles de irregularidad. En su caso, sí parece probable que el Atlético lo vuelva a prestar. Queda la duda de si Robert Moreno invitará a pujar por ello. Por ahora, no parece reflejado. En estas semanas se le relacionó con una posible salida al Udinese de la familia Pozzo, que no cuajó.

Precisamente de los italianos que controlaron el Granada en su día es el Watford inglés. Gino Pozzo dejó ir al equipo rojiblanco al portugués Domingos Quina en el pasado mercado de invierno. Con solo 21 años, irrumpió con goles, pero su juego no contentó al entrenador, que le veía disperso y anárquico. Fue desapareciendo de sus planes poco a poco, por lo que no tuvo tiempo de explotar en los partidos de competición.