El Granada tendrá que remontar el partido

Iñaki Williams anotó para los bilbaínos en una cantada impresionante del portero André Ferreira. Fue una jugada fugaz del Ahtletic, en la que Sancet envió un pase para Lekue, quien centró buscando la cabeza del mayor de los hermanos Williams. Ignasi Miquel saltó para despejar, pero midió mal y no llegó. Torrente, detrás y en la marca, no fue capaz de contener el remate del internacional por Ghana. Sin embargo, su cabeceo pareció salir sin mucha maldad, pero Ferreira puso mal las manos abajo y el balón se le descontroló, en una maniobra extraña tirado sobre el verde, siendo superado de manera incomprensible. Otra puerta a cero que se fue al limbo.

Fue duro de asimilar para el equipo local, que en menos de un minuto había tenido una ocasión clarísima. Torrente envió en largo desde atrás, la defensa bilbaína no despejó y el esférico se lo encontró Uzuni, quien erró el mano a mano ante Unai Simón. Chutó de zurda, pero el meta de la selección estiró su pierna con agilidad.

El Granada, aparte de la obligada novedad de Ferreira bajo palos, mostró a Gonzalo Villar como volante más adelantado de un trivote en el centro del campo. Gumbau hizo las veces de pivote defensivo, mientras que Sergio Ruiz completó la formación en la medular. Los demás, los mismos que en el Bernabéu.

Queda por ver si, con la reanudación, Alexander Medina introducirá alguna variación en el encuentro de este lunes, incluso alguna sustitución. Lo normal es que insista en los mismos protagonistas, pero de nuevo sus pupilos tendrán que remar a contraconrriente. Una velada complicada entre el dolor por Antonio.