El invitado a la fiesta puede ser un verdugo envidioso

Surgido del seno del propio club, del que es leyenda, el técnico ha estabilizado a un Lega que no daba con la tecla en el banquillo. Se ganó seguir a los mandos en Butarque con un libro de trabajo basado en la honestidad y un juego claro, sin exponerse en exceso y minimizando errores.

Juanjo Narváez y Eric Franquesa fueron sus primeros movimientos en invierno, si bien la guinda fue la llegada de Karrikaburu, pretendido, entre otros por el Granada. El delantero, más allá de las cifras, ha revitalizado la ofensiva pepinera.

Asier Riesgo ha mantenido la titularidad contra todo pronóstico, jugando solo nueve duelos Dani Jiménez. La experiencia ha sido un grado a la hora de apostar bajo palos por el vasco, con centenares de partidos a las espaldas tanto en Primera con la Real como luego en Segunda.

El Leganés cuenta con tres exrojiblancos de postín, uno por fila. Habrá que ver si participan, pero nada más goloso –y temido– para los agoreros que la sempiterna ley del ex. Atrás está Allan Nyom, héroe nazarí que con su férrea defensa y sus artes podría ser hoy verdugo. Miramón, Sergio y Jorge Sáenz completarían el equipo si no hay rotaciones para despedir el curso. En la medular es una revelación absoluta Sey Cissé, al que podrían acompañar tanto Undabarrena como el exnazarí Fede Vico, protagonista en el último salto a Primera del Granada. Su zurda, una peligrosa ex. Por último, arriba, el granadinismo podría conocer de cerca al pretendido Karrikaburu, acompañado de un ex obviable como Raba y José Arnaiz.